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Edward Snowden defiende su decisión de revelar espionaje de la NSA en entrevista con la NBC

Este artículo apareció originalmente en inglés el 30 de mayo del 2014.

El informante de la NSA (siglas en inglés de Agencia de Seguridad Nacional) Edward Snowden provee una defensa clara y articulada de sus acciones en una entrevista con el canal de noticias NBC. En su primera entrevista televisiva con los medios estadounidenses, Snowden denunció las actividades criminales de Washington declarando que "La Constitución de los Estados Unidos había sido violada en una escala masiva".

Es casi un año desde que la primera de las revelaciones de Snowden fuese hecha pública en un artículo del 5 de Junio de 2013 en diario británico The Guardian. Desde entonces Snowden ha sido acechado por el gobierno de EE.UU., obligado a buscar exilio en Rusia, vilipendiado como un traidor y amenazado con la violencia y la muerte.

Típico de las mentiras de la administración Obama fueron las recientes declaraciones por parte del Secretario de Estado de EE.UU. John Kerry, las cuales fueron repetidas en diferentes formas por parte de varios funcionarios gubernamentales en los días siquientes. Kerry denunció al informante como un "cobarde" por no retornar a EE.UU. para confrontar una farsa de juicio por el servicio público que ha llevado a cabo. La defensa de Snowden de sus acciones ha sido, en las declaraciones del jefe de Departamento de Estado que igualan la carencia de sus argumentos, una "necedad".

Snowden ha mantenido una posición de principios a través de esta campaña de amenazas y calumnia que ha durado un año. Su habilidad para hacerlo es reflejo no sólo de su coraje personal, sino también del amplio apoyo popular que aún posee. A pesar de sus intensos esfuerzos, la administración Obama y sus cómplices en los medios y otros gobiernos no han podido alterar la opinión pública.

Lo que Snowden ha revelado en una serie de filtraciones es el estado avanzado de un estado policíaco, tanto ilegal como constitucional. La Agencia de Seguridad Nacional y la red de espionaje de EE.UU. recolectan prácticamente todas las comunicaciones y arman amplias bases de datos con el propósito de monitorear las actividades personales, sociales y políticas de toda la población.

Al atacar a Snowden, la administración Obama y la NSA han buscado cubrir sus propios crímenes con mentiras, incluyendo la denuncia de que ciudadanos estadounidenses no caen indiscriminadamente en el espionaje.

Rechazando estas afirmaciones, Snowden declaró en la entrevista que "ahora toda nuestra data puede ser recolectada sin ninguna sospecha de fechorías en nuestra parte, sin ninguna razón fundamental (...) Todos tus registros privados, toda tu comunicación privada, todas tus transacciones, todas tus asociaciones, a quién hablas, a quién amas, qué compras, qué lees; todas estas cosas pueden ser tomadas y guardadas por el gobierno y luego usadas posteriormente para alguna razón casi sin justificación, sin ninguna supervisión real y sin que haya responsabilidad real para aquellos que hacen este mal".

Snowden añadió: "Ahora tenemos un penetrante sistema de vigilancia pre-criminal, en dónde el gobierno quiere observar lo que haces sólo para ver en qué estás metido, y en qué estás pensando detrás de puertas cerradas". Snowden describió la habilidad del estado, sobre la base de conocer el patrón de llamadas telefónicas, para construir un "patrón de vida" de quienquiera que desee.

Con software de monitoreo que puede ser instalado en la computadora de un objetivo, las agencias de espionaje pueden "ver en tiempo real las oraciones que escribes y luego borrar tus errores, cambiar las palabras y realizar una especie de pausa y pensar lo que quieres decir para entonces tergiversarlo. Y esta extraordinaria intrusión no sólo está en tus comunicaciones, tus mensajes acabados sino en tu proceso de bosquejos, en la manera en que piensas".

Como el World Socialist Web Site tomó nota en una declaración pasada haciendo un llamado por la movilización de apoyo popular en su defensa, la experiencia de vida de Snowden -30 años de edad- refleja la de una generación entera, una experiencia a la que Snowden se refirió en su entrevista con la NBC. El descontento con el existente estado social y político y la creciente oposición con éste no forma parte de las vistas de un proceso individual, sino parte de un cambio que involucra a millones de su generación. Este hecho es el que explica el extraordinario nivel de enojo y miedo dentro del aparato de estado que ha sido generado por sus acciones.

Snowden declaró que al comienzo creyó en la respuesta del gobierno a los ataques terroristas del 11 de Setiembre y sus afirmaciones sobre la guerra en Irak y que subió "a niveles cada vez más altos de las comunidades de inteligencia, obtuve más y más acceso, mientras veía información cada vez más clasificada en los niveles más altos, me di cuenta que muchas de las cosas que me dijeron del gobierno simplemente no eran ciertas. Como la mayoría de argumentos sobre tubos de aluminio y armas de destrucción masiva en Irak... La guerra en Irak a la que yo apoyé fue lanzada bajo falsas premisas. El pueblo estadounidense fue engañado".

Snowden también respondió a las declaraciones del gobierno de Obama de que debería regresar a los EE.UU. y "afrontar las consecuencias", como Kerry dijo en su reciente declaración. El secretario de estado declaró en el Today Show que Snowden debería "volver y presentar su caso... Él debería confiar en el sistema estadounidense de justicia".

Los cargos que enfrentaría bajo el acta de Espionaje, Snowden tomó nota, "no otorgan alguna oportunidad de hacer una defensa pública". Añadió que "no puedes discutir con un jurado de que lo que hiciste estuvo en el interés público... No se te permite discutir sobre la evidencia a tu favor porque esa evidencia puede estar clasificada, incluso si es justificante... No es una corte abierta y un juicio justo".

El verdadero carácter del "sistema estadounidense de justicia" es evidente en el tratamiento de Bradley (Chelsea) Manning, quién fue mantenido bajo confinamiento solitario y está ahora sirviendo una sentencia de prisión de 35 años.

Respondiendo a las afirmaciones del gobierno de Obama de que debería haber ido a través de "canales apropiados" en vez de exponer programas gubernamentales ilegales directamente a la población, Snowden declaró que en realidad había intentado alzar sus preocupaciones dentro del mismo NSA. "El NSA tiene registros", declaró. "Tienen copias de correos enviados a su Oficina de Asuntos Jurídicos (Office of General Counsel), para sus encargados de supervisión y conformidad, en los que yo expreso preocupación sobre las interpretaciones de la NSA de sus autoridades legales".

La respuesta de la agencia fue "más o menos, en lenguaje burocrático, 'debes dejar de hacer estas preguntas'", Snowden declaró. La NSA publicó un correo de Snowden, el cual evidentemente había estado escondiendo por un año mientras afirmaba no poseer evidencia de que Snowden había expresado sus preocupaciones.

Todos los operarios de inteligencia que habían levantado objeciones a programas ilegales en el pasado (Thomas Drake, William Binney, Kirk Wiebe, John Kiriakou, Manning y otros) han sido victimizados, perseguidos, amenazados y enjuiciados. "Hemos visto más acusaciones bajo el Acta de Espionaje en el último gobierno de lo que hemos visto en otros gobiernos en la historia de EE.UU.", Snowden indicó.

En cuanto a la denuncia hacia Snowden de ir a la "autoritaria" Rusia por parte del gobierno de Obama (una afirmación extraordinaria dada la naturaleza de los programas que Snowden ha revelado), el informante respondió: "La realidad es que nunca intenté acabar en Rusia. Tenía un vuelo programado para Cuba, hacia Latino América y fue detenido porque el gobierno de EE.UU. decidió rechazar mi pasaporte y quedé atrapado en el Aeropuerto de Moscú".

El gobierno de Obama y sus aliados europeos llegaron al punto de obligar a aterrizar un avión que llevaba al presidente boliviano bajo sospecha de que llevaba a Snowden abordo.

Hay indicios de que Snowden puede estar buscando un acuerdo con el gobierno estadounidense para que se le permita retornar a los EE.UU. Sus abogados están en discusiones con el gobierno de Obama sobre un posible acuerdo con el fiscal.

Snowden debe ser advertido de no colocar confianza en las promesas del gobierno estadounidense. Las agencias de inteligencia y el estado en conjunto se encuentran enfurecidos ante las acciones de Snowden y están determinados en hacer ejemplo de él. Ellos temen que otros Snowdens puedan ser alentados por sus acciones.

Durante la entrevista, Snowden evidenció una falta de comprensión de las fuerzas sociales y políticas que confronta. Esto salió a flote cuando, por ejemplo, citó a las "reformas" de la NSA promocionadas por el gobierno de Obama y el Congreso como una considerable señal de progreso. En realidad, estas medidas tienen como objetivo que el espionaje masivo continúe sólo que con una hoja de parra de legalidad y aprobación del congreso.

Snowden también declaró que los programas de espionaje que reveló "se extralimitaron" en respuesta a los eventos del 11 de Setiembre. Pero el monitoreo ilegal de la población no es una respuesta errónea a los ataques terroristas. Es más bien una subversión deliberada de los derechos constitucionales y democráticos por una élite corporativa y financiera que presiente y teme un descontento masivo revolviéndose por debajo de la superficie de la vida estadounidense. El espionaje está dirigido a toda la oposición social y política de las políticas de una clase gobernante sumergida en la criminalidad.

La perversa y enfurecida respuesta del establishment político a las revelaciones de Snowden es una expresión de estos mismos intereses sociales. Una vez más se debe hacer hincapié que la defensa de Snowden y la oposición al espionaje del estado policíaco que ha ayudado a revelar debe ser conectada a la independiente movilización de la clase trabajadora, en los Estados Unidos e internacionalmente.

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