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España: pseudo-izquierda catalana intensifica su agitación por la independencia

Este artículo apareció en inglés el 18 de septiembre del 2014

La posibilidad de que el más grande partido del gobierno de coalición en Cataluña, el partido Convergència i Unió (CiU, coalición entre Convergencia Democrática y Unión Democrática de Cataluña), pueda retirar su compromiso a un referendo sobre la independencia el 9 de noviembre ha llevado a que organizaciones nacionalistas de pseudo-izquierda intensifiquen su agitación separatista.

El mes pasado, las principales figuras de CiU sugirieron que el referendo podría ser archivado si la Corte Constitucional de España lo declarara inconstitucional. Uno de ellos declaró al diario El País: "En este escenario, no iremos a las ánforas, porque sería muy sencillo para nuestros oponentes", y por lo tanto el partido estaba "ya explorando otras posibilidades".

Al igual que sus co-pensadores en Escocia como el Partido Socialista de los Trabajadores, el Partido Socialista Escocés y la Campaña de Independencia Radical, la pseudo-izquierda en Cataluña intenta darle una facha progresiva a un movimiento nacionalista reaccionario. En Escocia la pseudo-izquierda actuó como peone del Partido Nacional Escocés; en Cataluña ellos lo son para el CiU y su partido de coalición, la Izquierda Republicana de Cataluña (ERC, siglas en catalán).

Un ejemplo típico es Josep María Antentas, miembro líder del pablista Izquierda Anticapitalista (IA) y el autor de un reciente artículo en Público: "11-S y 9-N: el momento de la verdad". "11-S" es una referencia al 11 de Setiembre: la fecha de enormes manifestaciones en los últimos par de años conmemorando la derrota de tropas catalanas ante el rey Felipe V de España en 1714. "9-N" hace referencia a la fecha planeada para el referendo.

Antentas declara que los meses venideros "para bien o para mal" podrán conducir a un quiebre "irreversible" con el marco constitucional creado en 1978, después del fin de la dictadura fascista, "o pueden representar el hundimiento épico del proceso iniciado en 2012, dejando tras de sí un legado de cinismo y frustración sin parangón".

El proceso al que Antentas se refiere es la declaración del CiU a favor de la independencia en vez de sus tradicionales llamados por una mayor autonomía. Desde el principio el objetivo de la clase gobernante catalana ha sido retransformar a Cataluña -que representa el 18.6 por ciento del PBI español- en un plataforma de bajos impuestos y de mano de obra barata para beneficiar a los bancos y a las corporaciones multinacionales. Las corporaciones en Cataluña también quieren terminar con los subsidios que sus impuestos de ingresos otorgan a las regiones más pobres de España. Al mismo tiempo, la clase gobernante intenta desviar las explosivas tensiones sociales en Cataluña, resultadas de la imposición de las medidas de austeridad más severas en España, las cuales han hecho que se llame a la región el "laboratorio de los recortes".

La afirmación de Antentas de que estos partidos buscan romper el marco de 1978 es un fraude. CiU, ERC y el otro promotor del "derecho a escoger", la Iniciativa Verde para Cataluña-Izquierda Alternativa (ICV-EUiA), han sido uno de los principales sostenes del establishment post Franco.

Antentas prosigue describiendo cómo después de las manifestaciones del 2012 y el 2013 y la aprobación del parlamento catalán de la Ley de los Referendos, es necesario sostener aun movimiento democrático de desobediencia que defienda el proceso de soberanía y desgaste al estado.

Como un abogado aconsejando a su cliente escribe: "Acatar al Tribunal Constitucional, como todo apunta que es la voluntad de [el presidente catalán Artur] Mas [Convergencia Democrática de Cataluña] sería un error estratégico de primer orden. Dada la evidencia (...) las fuerzas de izquierda quienes deben convertirse en los principales valedores de la consulta. En el momento de la verdad no debe quedar duda de quien apuesta hasta al final por el derecho a decidir".

Antentas pinta a la balcanización de España como algo inherentemente progresivo. La defensa de la unidad e independencia de la clase trabajadora no tiene nada que ver con sus políticas.

Mientras los trabajadores españoles sufren por el masivo desempleo, los recortes de salarios y el empobrecimiento, el IA y organizaciones similares aceleran su campaña en la cual usan a la clase trabajadora para reforzar a oscilantes facciones de la clase gobernante catalana.

Antentas afirma que no es un nacionalista: "La unidad para defender la consulta no debe confundirse con el mantra de la unidad patriótica que reduce todas las contradicciones sociales a la cuestión nacional y sirve para desactivar la resistencia a las políticas de austeridad".

Pero esta oración viene después de un párrafo en el cual aconseja a la Asamblea Nacional Catalana (ANC) seguir adelante con el separatismo, con o sin el apoyo de Mas. El ANC, creado en el 2012, hace un llamado por una Cataluña independiente dentro de la Unión Europea con el euro como su moneda y un ejército integrado a la OTÁN. Esto implicaría una masiva austeridad debido a las condiciones que Bruselas impondría y un incremento al gasto de defensa para la integración a la OTÁN y su participación en sus aventuras imperialistas.

Antentas es bastante consciente de que muchos trabajadores se oponen al proyecto nacionalista catalán, por lo tanto aconseja a los separatistas venderse de una mejor manera. Él declara que "un independentismo sin contenido social se muestra incapaz de conectar con una parte importante de la sociedad catalana de origen popular y trabajador menos identificada con el catalanismo".

El académico Antentas, supuestamente un experto en el campo de la globalización en la Universidad Autónoma de Barcelona, ignora cómo con la llegada de la producción global, en el cual todas las economías de los países están integradas a un todo mayor dominado por enormes corporaciones multinacionales y bancos, ha minado por completo todos los proyectos nacionales de reforma. Un estado catalán buscaría establecer relaciones más directas con los mayores bancos, las corporaciones y los especuladores ofreciendo una explotación cada vez mayor en la forma de ataques a los sueldos y condiciones laborales, la destrucción o privatización de los servicios sociales y los recortes de impuestos corporativos. Al mismo tiempo, la independencia significaría barreras más grandes entre los trabajadores catalanes y sus hermanos y hermanas de clase en España y por toda Europa.

Antentas intenta cubrir el crecimiento del nacionalismo catalán al afirmar que "quienes piden la independencia lo hacen en su mayoría porque piensan que ésta será sinónimo de más democracia y más igualdad". Esto es una mentira. El hecho de que el separatismo catalán haya obtenido una amplia aceptación popular es resultado de las traiciones de los sindicatos y los partidos nominalmente "izquierdistas" -el Partido Socialista Obrero Español y la Izquierda Unida- de los repetidos intentos de la clase trabajadora para oponerse a la austeridad. La desmoralización y la confusión han sido explotados por los separatistas quiénes han afirmado de manera repetida que una Cataluña independiente no tendría por qué poner recortes.

Antentas dice que la crisis que confronta los partidos oficiales catalanes y que la posibilidad de independencia abre el camino para un reagrupamiento de varias grupos de pseudo-izquierda con otras fuerzas como el Proceso Constituyente liderado por Teresa Forcades y el economista de ATTAC, Arcadi Oliveres. "Por primera vez en décadas, quienes queremos no sólo un cambio político, sino también un cambio de modelo económico y social tenemos posibilidad de jugar un papel relevante en la política catalana", declara. En otras palabras, la independencia les asegurará una posición privilegiada en el nuevo estado catalán.

Antentas termina su polémica separatista declarando que el referendo no es "simplemente un asunto catalán". Mas bien, insiste, sería "una fabulosa oportunidad para asestar un golpe certero al maltrecho buque de la Transición [...] Si el Primer Ministro [del Partido Popular (PP)] Mariano Rajoy pierde el pulso catalán, su autoridad en todo el Estado [español] quedará debilitada. La sensación de naufragio será generalizada [...] Nadie sabe qué pasaría si hubiera un choque frontal entre las instituciones del Estado español y las catalanas [...] Pero de una sacudida así nada bueno puede acontecer para el maltrecho régimen actual".

Antentas no hace ninguna evaluación de la determinación del gobierno de Rajoy de prevenir que se mantenga un referendo o la verdadera posibilidad de una intervención militar o policíaca. La pseudo-izquierda está fomentando condiciones en las que el gobierno tendrá el pretexto perfecto para aplicar la mano dura a la clase trabajadora, la cual debido a la fuerte promoción del nacionalismo será severamente debilidad y dividida.

La única respuesta progresiva a la crisis del sistema de estado-nación es poner fin a todas las divisiones nacionales adoptando la perspectiva del internacionalismo socialista. El Comité Internacional de la Cuarta Internacional (CICI) hace un llamado para una lucha contra el capital organizado globalmente, no el ofrecimiento de incentivos fiscales corporativos. Estamos a favor del derrocamiento del imperialismo español y su aparato de estado, no la creación de un nuevo estado represor en Cataluña.

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