Esta declaración será distribuida por los simpatizantes del SEP en las protestas que han sido organizadas por todo EUA el sábado, 30 de junio. Está disponible una versión en PDF para que la puedas descargar y distribuir en la manifestación en tu área. Contacta al SEP si te gustaría unirte al equipo.
Las manifestaciones de hoy contra los ataques a inmigrantes ocurren en momentos que conmueve y aterra a todo el mundo una serie de peligrosos ataques de parte del gobierno de Trump.
Dos mil niños y niñas permanecen separados de sus familias, enjaulados y en centros de detención a través de Estados Unidos. La Armada estadounidense anunció hace una semana que proyecta la construcción de una red de campos de concentración “austeros” donde cabrían ciento veinte mil personas.
En el caso Trump versus Hawaii, la Corte Suprema de Estados Unidos produjo una gran victoria política para Trump, aprobando su veda a la entrada de musulmanes al país; dándole poderes desenfrenados para hacer uso de “autoridad ejecutiva” y pavimentando el camino para más medidas dictatoriales. Ahora que se jubila el juez de la Suprema Corte Anthony Kennedy, Trump tendrá el poder de transformar la corte aún más hacia la derecha.
Trump ahora liga estas maniobras con su lenguaje fascista. Exige que se elimine el proceso debido para inmigrantes, diciendo en tuits que “Cuando alguien llega, de inmediato debemos enviarlos de regreso. Nuestro sistema es una burla de buenas medidas inmigratorias y de la Ley y el Órden”.
Esas palabras mucho recuerdan a los discursos de Adolf Hitler y Heinrich Himmler.
Esta manifestación hoy demuestra cómo crece el repudio a la persecución de los inmigrantes. Por lo tanto es necesario un enfoque claro y una perspectiva política clara.
1. El ataque contra los inmigrantes es un fenómeno internacional. No existe ninguna estrategia nacional viable para defender los inmigrantes.
La ONU ha hecho públicas estadísticas que demuestran que en el año 2017 sesenta y nueve millones de personas huyeron de guerras, violencia, persecución y opresión; anualmente en cada uno de últimos cinco más crece esta cifra record. Los inmigrantes huyen de la pobreza y violencia causadas por la guerra imperialista, bajo la dirección de Estados Unidos, que ha destruido a países tales como Afganistán, Siria, Yemen, Libia y Somalia.
En Europa las clases de poder azuzan la xenofobia para convertir a los inmigrantes africanos y del medio oriente en chivos expiatorios, culpándolos de ataques a empleos y sueldos.
En Italia, Francia, Alemania, Austria, Eslovenia, Hungría, Polonia y otros lugares, partidos de extrema derecha se hacen más poderosos ante el vacío producido por las medidas pro libre empresa y pro guerra de los supuestos partidos de izquierda.
2. La ofensiva contra los inmigrantes es para desviar atención de la verdadera causa de pobreza y desigualdad: el sistema capitalista.
Según Trump, las medidas antiinmigrantes, racistas y xenofóbicas, son para defender los empleos y sueldos de los trabajadores no inmigrantes. Acusa a los inmigrantes de ser los culpables de “crímenes” y putrefacción social.
El propósito de esos embustes es dividir a los obreros y provocar a un sector de la clase obrera contra los otros, luchando todos por las migajas (sueldos, beneficios y servicios esenciales de hambre) de la mesa de una élite de poder obscenamente rica. La crisis de los niveles de vida en todos los países nace de la enorme monopolización de la riqueza por una pequeñísima aristocracia financiera.
3. El Partido Demócrata es culpable de los ataques a los inmigrantes y de las crecientes amenazas contra los derechos democráticos.
Antes de Trump, Barack Obama deportó 2,7 millones de personas. Así se ganó el apodo de “deportador en jefe”. Durante los primeros dos años del gobierno de Trump, los del Partido Demócrata han intentado desorientar y diluir el repudio a las medidas antiinmigrantes de Trump y atarlo al carro de sus campañas guerreristas y antirrusas.
En cuanto al Senador de Vermont, Bernie Sanders, cuando CNN le preguntó si proponía abolir a Immigration and Customs Enforcement (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, ICE), la misma agencia que administra los ataques tipo Gestapo contra los inmigrantes, respondió “Creo que necesitamos medidas racionales frente a la inmigración … Trump necesita negociar con miembros del Congreso y elaborar un programa racional que resuelva esta seria situación”.
Tal respuesta es una postración ante el programa antiinmigrante de Trump. Un plan “racional” de inmigración es para el Partido Demócrata y Sanders uno que encarcele y expulse del país a millones de inmigrantes, fortalezca la frontera con tecnologías militares y obligue a miles de refugiados de la pobreza y violencia a morir en el desierto.
4. La clase trabajadora, la fuerza social que puede y debe frenar la marcha hacia la dictadura, es el principal objetivo de los ataques contra derechos democráticos.
El conflicto entre Trump y los del Partido Demócrata es entre dos fracciones reaccionarias de la élite de poder. Un movimiento genuino contra Trump debe surgir desde abajo, de la gran masa de la población, la clase obrera, que ahora vive excluida totalmente de la vida política. Tal movimiento debe considerar un enorme peligro político toda asociación con el Partido Demócrata y todos sus testaferros.
Este año han ocurrido importantes ejemplos de la combatividad de la clase obrera, luchas que surgieron y crecieron independientemente de sindicatos corporativos, aliados al Partido Demócrata. Esas luchas deben extenderse con la participación de todos los sectores de la clase obrera.
La defensa de los inmigrantes debe ligarse a la lucha contra desigualdad, ataques a empleos y salud, deuda estudiantil creciente y la destrucción de la educación pública. Debe fluir de un entendimiento de que al atacar a los inmigrantes atacan a todos los trabajadores; que los métodos de represión policial que están siendo preparados serán utilizados contra todos los que se opongan a las medidas de la clase de poder.
¡Luchen por el socialismo! ¡Únanse al Partido Socialista por la Igualdad!
El Partido Socialista por la Igualdad exige:
- ¡Formar comités de lugares de trabajo, barrio y de escuelas, para movilizar amigos, compañeros de trabajo y familiares en defensa de inmigrantes en peligro de ser detenidos o deportados!
- ¡Libertad inmediata para todos los niños y niñas encarcelados en Estados Unidos y para todos los inmigrantes que están en campos y centros de detención en todo el mundo!
- ¡Liquidar la Gestapo estadounidense — Immigration and Customs Enforcement y and Border Protection (Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza)!
- ¡Fronteras Abiertas!¡Por el derecho de los trabajadores de vivir y trabajar donde quieran, sin temor a ataques o deportaciones!
- ¡Billones de dólares para servicios públicos y programas de empleo para todos los obreros, sean inmigrantes o no!
El Partido Socialista por la Igualdad está al frente de la lucha en defensa de los inmigrantes con un movimiento socialista revolucionario de la clase obrera internacional. Propone un programa socialista y lucha por un gobierno obrero que garantice los derechos de clase trabajadora, expropie la riqueza de la oligarquía financiera, transforme a los bancos y grandes empresas en compañías públicas, y establezca el control obrero sobre los lugares de trabajo y los métodos de producción.
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SOBRE EL SEP
La labor central del Partido Socialista Por la Igualdad, SEP, es luchar para que los trabajadores en Estados Unidos apoyen el programa del socialismo internacional. El SEP lucha, en base a su programa, a unir y movilizar la clase obrera para conquistar el poder político y establecer en Estados Unidos un gobierno obrero. De esa manera construirá las precondiciones objetivas para la creación de una sociedad genuinamente democrática, igualitaria socialista.
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(Artículo publicado originalmente en inglés el 29 de junio de 2018)