Español

Anticapitalistas llama a votar al partido belicista Sumar para las elecciones del 23 de julio

El ascenso del Partido Popular (PP) y del partido neofascista Vox en las elecciones autonómicas y municipales de mayo y la debacle de Podemos, que ha gobernado en un gobierno proguerra y proausteridad con el Partido Socialista (PSOE) durante casi 4 años, muestra la bancarrota política de Podemos. En reacción a estos resultados, el Gobierno PSOE-Podemos anunció elecciones anticipadas para el 23 de julio. Ahora, la campaña electoral se centra en las discusiones con el PP sobre la presidencia española de la Unión Europea en medio de la guerra de la OTAN contra Rusia en Ucrania, dejando abierto el camino para que el PP y Vox lleguen al poder.

Teresa Rodríguez hablando durante el lanzamiento de Podemos en enero de 2014 [Photo by https://www.youtube.com/channel/UCtK7s89RJ9X9Nv9EQCMu9Lg / CC BY-SA 3.0]

En este contexto, la tendencia pequeñoburguesa pablista Anticapitalistas está intentando maniatar a los trabajadores a la plataforma electoral Sumar, recientemente formado por fuerzas del Gobierno PSOE-Podemos. El objetivo de esta política reaccionaria es bloquear un movimiento de la clase obrera tanto contra el neofranquismo como contra las políticas totalmente reaccionarias de Podemos. Este es el carácter del artículo publicado en Viento Sur por el veterano pablista Jaime Pastor titulado 'Del 28M al 23J. Marea derechista vs. progresismo en declive'.

Pastor dice que 'la izquierda anticapitalista también debe asumir su parte de responsabilidad en la situación de derrota colectiva en la que nos encontramos y que le lleva a estar prácticamente ausente como alternativa política en la próxima confrontación electoral. No por ello debería desentenderse de la necesidad de contribuir a impedir la victoria del bloque de derechas, ya que no podemos subestimar la amenaza que supondría su acceso al gobierno del Estado con el consiguiente ataque a derechos civiles y sociales fundamentales (en primer lugar, contra las personas procedentes del Sur y las mujeres) y el refuerzo de una mal llamada democracia militante, dispuesta incluso a ilegalizar a una parte del actual espectro parlamentario.”

De hecho, Pastor esta respaldando a Sumar, una alianza electoral compuesta por Podemos, Movimiento Sumar e Izquierda Unida (IU) dirigida por los estalinistas. La plataforma electoral está liderada por la vicepresidenta del Gobierno en funciones y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. La semana pasada, Sumar lanzó una campaña de derechas y proguerra, presentando a docenas de candidatos pro-OTAN que han seguido las políticas del gobierno de coalición PSOE-Podemos de guerra imperialista contra Rusia en el extranjero y guerra de clases contra los trabajadores en casa.

En la comunidad autónoma más poblada del país, el frente de Anticapitalistas Adelanta Andalucia, no competirá en 7 de las 8 provincias para no dividir el voto de Sumar, argumentando que nos encontramos en un situación “extraordinario” y que hay que “hacer un ejercicio de responsabilidad para contribuir a frenar a las derechas y a la ultraderecha”.

La presentación por parte de los pablistas del apoyo a Sumar como una estrategia para luchar contra el auge de la extrema derecha es un fraude político. En realidad, el propio Gobierno de coalición, respaldado por Anticapitalistas, ha llevado a cabo políticas que antes habrían sido impensables salvo bajo regímenes de extrema derecha. Esto ha allanado el camino para que la burguesía española legitime a Vox.

Los brutales ataques del Gobierno PSOE-Podemos a la clase obrera incluyen recortes de las pensiones que consolidan la edad de jubilación a los 67 años, aumentos salariales por debajo de la inflación a amplias capas de trabajadores y una reforma laboral que recorta derechos a los trabajadores. Además, el Gobierno ha impuesto salvajes servicios mínimos para romper las huelgas de los tripulantes de cabina, pilotos y a los trabajadores sanitarios, y desplegado decenas de miles de policías para suprimir las huelgas de metalúrgicos y camioneros.

En cuanto a las personas “procedentes del Sur” a los que se refiere Pastor, el Gobierno PSOE-Podemos también ha aplicado brutales políticas antiinmigrantes fascistoides defendidas por Vox. Tras la llegada de Podemos al poder, el gobierno español ha envi ado al ejército contra refugiados en Ceuta, presionado a la OTAN para que incluyera la inmigración como una 'amenaza híbrida', internado a los migrantes en campos de concentración en las Islas Canarias y cometido una masacre como la de Melilla el año pasado que dejo por lo menos 37 refugiados muertos.

El Gobierno PSOE-Podemos también se ha sumado a la guerra de la OTAN contra Rusia en Ucrania e impuesto el mayor aumento del gasto militar de la historia de España, hasta superar los €26.000 millones anuales. Además, ha enviado cientos de millones de euros en ayuda militar a Ucrania, incluido lanzacohetes, vehículos blindados y tanques, y formado a más de 850 soldados ucranianos en suelo español. Las armas españolas proporcionadas por Podemos y Sumar han acabado en manos de la unidad neonazi Batallón Azov.

Podemos y Sumar no combaten a la extrema derecha, sino que sirven de herramientas políticas a la burguesía para aplicar políticas fascistizantes. Sólo es posible oponerse a tales políticas rompiendo conscientemente con los partidos de pseudoizquierda de la clase media acomodada como Anticapitalistas.

Durante décadas han trabajado para estrangular políticamente a la clase obrera, exigiendo que los trabajadores se subordinasen a partidos imperialistas como el PSOE o estalinistas como Izquierda Unida o Podemos. Esto ha permitido que partidos como Vox se postulen como la única oposición real al desprestigiado establishment político español.

En 2014, Anticapitalistas fundó Podemos con profesores estalinistas, orientándose explícitamente al PSOE, el principal partido del capitalismo español. En 2018, en medio de una creciente oposición popular al PP y a sus políticas represivas en Cataluña, Podemos organizó una maniobra parlamentaria, desbancando al PP y sustituyéndolo por un gobierno minoritario del PSOE. Anticapitalistas dio la bienvenida a esta maniobra, admitiendo en un comunicado que el “PSOE no representa una alternativa real ni al Régimen del '78, ni a sus políticas estructurales ni a los dictados de la UE”, pero afirmando que Podemos podría “presionar fuertemente (en las instituciones y en la calle) a un gobierno débil a nivel numérico y débil a nivel de proyecto.”

A pesar de estas afirmaciones, el Gobierno del PSOE respaldado por Podemos continuó con el presupuesto de austeridad del PP, regó al ejército con miles de millones de euros, atacó a los inmigrantes y continuó con la campaña anticatalana. En todo momento, las iniciativas de Anticapitalistas no tenían como objetivo organizar la oposición a la clase dominante y sus políticas fascistas, sino salvaguardar los intereses estratégicos esenciales del capital financiero español y europeo.

En 2019, el Gobierno del PSOE convocó elecciones anticipadas en un intento desesperado y finalmente fallido de apuntalar su apoyo. Después de las elecciones de abril de 2019, que produjeron otro parlamento sin mayoría, estalló un amargo debate en la clase dominante española sobre cómo montar un gobierno. El PSOE estaba decidido a anunciar una sentencia draconiana tras el juicio amañado de los presos nacionalistas catalanes en octubre de 2019, en línea con las demandas de fuerzas como Vox.

En Podemos surgió un debate sobre si entrar directamente a gobernar con el PSOE. Finalmente, su facción Anticapitalistas ganó el debate. Pastor pidió prudencia y aconsejó a Podemos esperar un tiempo antes de entrar en un gobierno liderado por el PSOE. Se mostró dispuesta a apoyar la adaptación de Podemos al PSOE, pero insistió cínicamente en que desde Anticapitalistas no podían verse haciéndolo.

En las páginas de Viento Sur, Pastor decía que “difícilmente cabía pensar que [Unidas Podemos] UP hubiera podido desarrollar políticas de izquierda desde el gobierno y, en cambio, con su silencio habría tenido que asumir la complicidad con políticas de derecha en lo económico-social y represivas en relación a Catalunya.”

Pastor no se opuso a entrar en un gobierno liderado por el PSOE y ser cómplice de las políticas de derechas. De hecho, Anticapitalistas llegó a formar parte del Gobierno PSOE-Podemos en enero de 2020, antes de abandonarlo tres meses después. En ese periodo, jamás se opusieron a las políticas emblemáticas de Podemos en el gobierno: sus políticas de guerra y militarismo, su orden de vuelta al trabajo en medio de la pandemia COVID-19 que provocó cientos de miles de muertes, sus políticas de austeridad y sus medidas de Estado policial en Cataluña.

De hecho, en su comunicado de salida del gobierno, Anticapitalistas decía que “Desde luego, apoyaremos todas las conquistas que se produzcan en este marco [del Gobierno PSOE-Podemos] y combatiremos juntos a la extrema derecha” y concluía que “no hay duda de que nos encontraremos en muchas luchas comunes con la gente de Podemos.”

En su momento, el WSWS advirtió que la salida de Anticapitalistas era una maniobra para preservar la capacidad de Anticapitalistas de ocultar su historial derechista e intervenir en las luchas sociales para bloquear la oposición de la clase trabajadora. Esta tendencia estaba siendo enviado por Podemos, advertía el WSWS, 'para servir como agente a sueldo del Estado capitalista español, interviniendo en las redes sociales y en las protestas y huelgas hostiles a Podemos para espiarlas y estrangularlas'.

Estas advertencias se cumplieron plenamente. Desde Cádiz, el alcalde de Anticapitalistas, José María González 'Kichi', exigió a 22.000 trabajadores del metal en huelga en la provincia que respetaran la traición de los sindicatos en su acuerdo con la patronal en noviembre de 2021, mientras el gobierno de Podemos enviaba antidisturbios y vehículos blindados contra los huelguistas.

Tras el estallido de la guerra en Ucrania en febrero de 2022, Anticapitalistas publicó virulentos artículos antirrusos y pro-OTAN en las páginas de Viento Sur mientras Podemos enviaba millones de euros a Ucrania.

Los trabajadores ven con razón a Anticapitalistas como parte del establishment político. En las elecciones del mes pasado, compartió el mismo destino que Podemos. Su frente, Adelante Andalucía, perdió la alcaldía de Cádiz y se quedó sin representación en todas las demás ciudades importantes de Andalucía.

El historial reaccionario de Anticapitalistas subraya que la cuestión estratégica decisiva hoy es construir el Comité Internacional de la Cuarta Internacional (CICI) como la dirección revolucionaria en la clase obrera contra las fuerzas corruptas de pseudoizquierda como Podemos. Esto requiere construir secciones del CICI en España y a nivel internacional, basándose en las colosales experiencias políticas encarnadas en su defensa del trotskismo, para librar una lucha sin concesiones contra todo el establishment político, incluida la burocracia sindical y grupos como Anticapitalistas.

(Publicado originalmente en inglés el 19 de junio de 2023)

Loading