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Mientras los trabajadores se preparan para una lucha, el presidente Jones del UAW y expresidente Williams son identificados como cómplices en corrupción

El presidente del sindicato United Auto Workers, Gary Jones, y el expresidente Dennis Williams son el "Oficial A del UAW" y "Oficial B del UAW" en la denuncia penal presentada el jueves contra el director de la Región 5 del UAW, Vance Pearson, informó el viernes el Detroit News, citando a tres fuentes no identificadas.

Las casas de Jones y Williams fueron allanadas hace dos semanas por investigadores del FBI en una operación nacional que también involucró a Pearson, el principal asistente de Jones cuando Jones era director de la Región 5, así como a la exasistente de Williams, Amy Loasching.

Presidente del UAW, Gary Jones [crédito: AP Photo/Carlos Osorio]

En el caso penal, las autoridades federales identificaron a cuatro altos funcionarios actuales y anteriores como cómplices en el esquema de malversación de fondos. El Gobierno detalló numerosas instancias en las que los funcionarios "A" y "B" gastaron el dinero de las cuotas de los trabajadores en campos de golf, botellas de champán de $400, cigarros y alquileres de meses de duración en villas privadas en Palm Springs, California, todo encubierto por reportes de gastos falsificados.

Los últimos hallazgos crean una situación sin precedentes. Menos de 24 horas antes de la expiración del contrato de los trabajadores automotores, los presidentes actuales y anteriores del UAW han sido expuestos como gánsteres y el sindicato como una organización criminal.

Al momento de escribir este artículo, Jones aún conserva su puesto como presidente del UAW después de una reunión de emergencia de la Junta Ejecutiva Internacional (IEB, todas las siglas en inglés) del sindicato el viernes por la tarde. Los funcionarios del UAW que salieron de la reunión se negaron a responder las preguntas de los periodistas. El conductor de Jones y otros más impidieron físicamente que un periodista del Associated Press se acercara a Jones para hacerle preguntas.

Si bien, sin duda, hay divisiones intensas en el aparato sindical sobre cómo proceder, una facción del IEB favorece la expulsión de Jones para evitar una toma federal del sindicato, según el Detroit News, el hecho de que Jones siga siendo presidente del sindicato es una medida más del desprecio del aparato sindical hacia la base de obreros. Es una señal clara de que, de una forma u otra, el UAW está decidido a hacer valer los dictados de las empresas, que exigen nuevos recortes en el seguro de salud y una expansión masiva del trabajo a tiempo parcial y temporal.

Después de que más del 96 por ciento votara a favor de la autorización de huelga, los trabajadores automotores buscan luchar contra las empresas para recuperar salarios, beneficios y empleos perdidos y poner fin al odiado sistema de dos niveles salariales. Cada vez es más claro que se enfrentan a una lucha no solo contra los gerentes, sino también contra el sindicato patronal.

Sin embargo, en medio de advertencias en los medios de comunicación de que un aparato sindical desacreditado y debilitado no podrá controlar la ira explosiva de los trabajadores, el UAW está intensificando su conspiración con las compañías automotrices. Ese es el significado del silencio del sindicato luego de su reunión de crisis el viernes. Esta organización proempresarial está buscando idear nuevos medios para socavar la militancia de los trabajadores y sabotear su lucha. CNN Business y Automotive News informaron ayer que la primera compañía con que se firmaría un contrato General Motors y el UAW están considerando cada vez más una extensión temporal del contrato. Automotive News informó que "dos personas informadas sobre el asunto dicen que GM puede solicitar una extensión temporal del contrato y podría buscar otras opciones, incluida la búsqueda de asistencia de un tercero". Varios medios de prensa han argumentado que se cierne una posible imputación contra los líderes del UAW que imposibilitaría seguir las conversaciones con las empresas.

El propósito de tal maniobra sería ganar tiempo para aplicar a la fuerza concesiones. La referencia a "asistencia de terceros" sugiere que una extensión del contrato podría combinarse con una mediación federal o alguna forma de supervisión.

Esto hace incluso más urgente que los trabajadores automotores actúen ahora para tomar la conducción de la batalla contractual en sus propias manos. No hay tiempo que perder para formar comités de base en cada planta y coordinar una lucha nacional de los trabajadores de GM, Ford y Fiat Chrysler (FCA) para revertir décadas de concesiones, ganar los salarios, beneficios y seguridad laboral que necesitan los trabajadores, y transferir a todos los trabajadores temporales de segundo nivel y tiempo parcial a la escala completa.

Los trabajadores deben formar sus propios órganos democráticos de lucha, independientes del UAW, para coordinar las acciones de una huelga nacional y solicitar el apoyo de los trabajadores automotrices en Canadá, México y en todo el mundo, así como de los maestros, los trabajadores de Amazon y la clase trabajadora en general.

No importa cuál táctica se desarrolle entre el UAW y las compañías automotrices, ya sea una extensión de contrato, un acuerdo tentativo, una huelga simbólica o una intervención gubernamental, el sindicato trabajará para derrotar a los trabajadores y los trabajadores deben estar en condiciones de afirmar su intereses propios

Los trabajadores deben celebrar reuniones en cada planta para elegir a sus propios líderes entre los trabajadores de base más confiables, elaborar una lista de sus propias demandas y preparar un plan de acción para movilizar a los trabajadores automotores en todo el país e internacionalmente.

La situación ahora se encuentra en el filo del cuchillo. Hay varios escenarios posibles que pueden desarrollarse en las próximas 24 a 48 horas.

Detrás de todo está la intervención federal. Los últimos cargos "[aumentan] la probabilidad de que el Gobierno presente cargos contra el sindicato de RICO (Organizaciones influenciadas por extorsión y corruptas)” similar a los que se usaron para colocar al sindicato Teamsters [de camioneros] bajo Administración federal en la década de 1980, Erik Gordon, profesor de negocios en la Universidad de Michigan, dijo al Detroit News .

Tal maniobra de la Administración de Trump no estaría dirigida a "limpiar la casa" o democratizar el sindicato. Al igual que con la tutela federal de los Teamsters, estaría dirigida a evitar una rebelión de trabajadores automotores contra el aparato corrupto del UAW.

Temiendo que los trabajadores automotores escapen del control del UAW, la Administración de Trump y la élite corporativa están utilizando el enjuiciamiento cada vez más amplio de los funcionarios sindicales, seis funcionarios del UAW hasta ahora, para presionar al sindicato para que no se adapte a las demandas de los trabajadores y, en su lugar, imponga por completo las nuevas concesiones exigidas por las empresas automotrices.

Pero el Gobierno federal está jugando con fuego. Los analistas de la industria están cada vez más preocupados de que las exposiciones gubernamentales de corrupción del UAW provoquen una tormenta de oposición entre los trabajadores automotores, lo que hará casi imposible ratificar cualquier contrato. "GM no tiene interés en tener un UAW debilitado", dijo a CNN la analista Kristen Dziczek. "No quieren llegar a un acuerdo tentativo con líderes al otro lado de la mesa incapaces de ratificarlo con las bases obreras".

Además de una extensión de contrato, otro escenario posible es que el UAW convoque huelgas limitadas de "Hollywood" en varias plantas de General Motors para que los trabajadores se desahoguen. El UAW ya está trabajando para aislar deliberadamente a los trabajadores en caso de una huelga.

Ayer, el sindicato firmó extensiones del contrato en Ford y Fiat Chrysler. Esto se hace para romper la unidad de los trabajadores automotores y obligar a cada sección de los trabajadores a enfrentar a una empresa a la vez. Mientras tanto, los fabricantes automotores, sus patrocinadores de Wall Street y el UAW colaboran para emprender juntos contra los trabajadores.

Los funcionarios sindicales locales en la planta de Spring Hill de GM en Tennessee están instruyendo a los trabajadores de limpieza a que crucen la línea de piquete si los trabajadores ensambladores hacen huelga. Y en medio de un amplio apoyo a una huelga total, los dirigentes sindicales y los llamados líderes de equipo se han desplegado en todas las plantas para ordenarles a los trabajadores de Ford y FCA que no salgan a la medianoche de esta noche.

El sindicato también ha planteado la idea de que convocará una huelga de varios cientos de conserjes empleados por Aramark en cinco plantas de GM cuyos contratos del UAW expiran al mismo tiempo, y luego instruirá a los trabajadores automotores a respetar sus líneas de piquete.

De una forma u otra, el UAW quiere limitar cualquier acción para que tenga el menor impacto posible para GM.

Sin embargo, en un editorial del viernes, el Detroit News expresó el temor de que la ira entre los trabajadores sea tan explosiva que incluso una huelga simbólica podría escaparse rápidamente del control del sindicato. Suplicándole al UAW que no convoque una huelga, el consejo editorial escribió: "Los funcionarios del UAW deben saber que es mucho más fácil llamar a los trabajadores a hacer huelga que devolverlos a sus trabajos ... los trabajadores automotores podrían no confiar en ninguna propuesta que Jones les presente, y por lo tanto se negarán a ratificarlo como una forma de protesta. Eso podría convertir fácilmente lo que debería haber sido una huelga corta en una mucho más larga".

Otra posibilidad es que el UAW y General Motors anuncien un acuerdo tentativo poco antes o poco después de que expire el plazo, de manera similar a lo que ocurrió en 2015. Si bien aún es una posibilidad, algunos analistas lo consideran cada vez más remoto debido a la probabilidad de que cualquier acuerdo, negociado durante meses tras un muro de silencio, sea rechazado por los miembros. Por otro lado, las circunstancias dudosas detrás de la ratificación del contrato de Ford en 2015 demuestran que el UAW está perfectamente dispuesto a rellenar votos y amenazar a los trabajadores con despidos para que se aprueben las concesiones.

Los medios de comunicación han especulado durante meses que GM y el UAW podrían llegar a un acuerdo que combine concesiones importantes, incluido un mayor uso de trabajadores temporales y otras medidas destinadas a reducir los costos laborales, con la reapertura de una de las cuatro plantas de EUA cuyo cierre se anunció en diciembre, muy probablemente la planta de ensamble de Detroit-Hamtramck. El presidente Trump, sin duda, aclamaría que tal acuerdo es una victoria para los "empleos estadounidenses".

Independientemente de lo que el UAW y GM finalmente maniobren este fin de semana, los trabajadores automotores deben aprovechar la iniciativa y asegurarse de que sus aspiraciones e intereses no sean traicionados por otra maniobra podrida. Si se convoca una huelga, los trabajadores deben elegir comités de huelga de las propias bases para instar a los trabajadores de cada fábrica a unirse a una lucha común.

Necesitan hacer un llamamiento a todas las secciones de trabajadores en Detroit y en todo el país para que se unan a una contraofensiva contra décadas de disminución de salarios, cierre de fábricas y desigualdad social. Deben apelar a una lucha común con los trabajadores en Canadá y en México, donde los trabajadores de GM ya han expresado su solidaridad al oponerse a los esfuerzos de GM de trasladar la producción adicional al complejo de Silao para compensar la producción perdida en caso de huelga.

La conferencia en línea del jueves organizada por el WSWS Autoworker Newsletter, en la que participó una audiencia internacional de 300 personas, demostró los poderosos lazos que existen entre los trabajadores automotores en los Estados Unidos y sus hermanos y hermanas en México y en todo el mundo, que se enfrentan a los mismos ataques a sus empleos y niveles de vida.

El World Socialist Web Site está listo para ayudarles a los trabajadores en todas las formas posibles para construir una nueva dirección en las bases.

Visita wsws.org/auto y comienza la lucha de los trabajadores automotores hoy.

(Artículo publicado originalmente el 14 de septiembre de 2019)

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