A raíz de la finalización de la huelga en General Motors por parte del sindicato United Auto Workers, la compañía ha llevado a cabo despidos de trabajadores por sus publicaciones en las redes sociales durante la huelga de 40 días.

Mientras que el número de trabajadores victimizados todavía no está claro, por lo menos tres de ellos eran trabajadores de la planta de ensamble de camionetas en Flint, una de las fábricas más grandes y rentables de GM. Uno de los trabajadores es Juan Gonzales, un veterano de 19 años de General Motors, quien se enfrentó a GM Global Security cuando llegó al trabajo el lunes por la mañana y lo llevaron a laborales donde le mostraron fotos de su página de Facebook. Después González fue despedido sumariamente.

En una publicación en su página de Facebook el lunes por la mañana, Gonzales escribió: “¡Despedido en laborales! No publiquen en ningún sitio de redes sociales, la seguridad de GM desde Detroit las monitorea y todo lo que publiqué durante toda la huelga estaba en un sobre de manila. ¡Quédense fuera de ellos!”.

Gonzales es un trabajador sin pelos en la lengua que publica comentarios en varias páginas de Facebook donde los trabajadores automotores se comunican, incluso contra la colusión del UAW con la corporación. También fue entrevistado en la línea de piquete frente a la planta en Flint varias veces por los medios locales. El primer día de la huelga, el 16 de septiembre, denunció a GM por obtener ganancias récord y no darles nada a los trabajadores, y le dijo a un periodista de NBC 25 que la compañía "continuaba obteniendo todos los beneficios y nosotros seguimos donde estamos".

En un intento para justificar esta escandalosa violación de la libertad de expresión, el Detroit Free Press y otros medios corporativos han denunciado infundadamente que los trabajadores fueron despedidos por publicar mensajes amenazantes en las redes sociales o presuntamente participar en incidentes violentos en la línea de piquete. El Free Press citó a una "persona familiarizada con los despidos" sin nombrarla, indicando que: "Se vinculan con las amenazas de bomba y las amenazas de violencia real en la línea".

Los trabajadores han refutado esta mentira difamatoria. Uno de los trabajadores victimizados, que no quería que se usara su nombre, le dijo a la filial local de ABC-TV que fue despedido por publicar comentarios de que "iba a romper algunos huevos" por frustración, pero que no amenazó con violencia.

Gonzales y otros trabajadores están claramente siendo sometidos a un atropello a sus derechos de la Primera Enmienda a la Constitución por criticar a una corporación gigante que está cerrando plantas y destruyendo los medios de vida y las comunidades de miles de trabajadores y condenando a toda una generación al estatus de trabajadores temporales mal pagados. Los trabajadores le han dicho al Boletín de los Trabajadores Automotores del WSWS que los agentes de GM Global Security están utilizando perfiles falsos para controlar páginas privadas de redes sociales y para monitorear los comentarios de los trabajadores, y también deben haber escaneado la cobertura de la huelga en los medios locales.

"Evidentemente, GM Global Security tiene personas en cada página del sindicato y el UAW", dijo un trabajador de la planta de ensamblaje de Jeep de la FCA en Toledo, Ohio, al Boletín de los Trabajadores Automotores. "Enfrentaron a Juan con una carpeta llena de publicaciones que hizo en 10 páginas diferentes".

Otro trabajador de Toledo Jeep dijo: "No encontré nada nefasto cuando investigué las publicaciones de Juan. El Detroit Free Press informa que todos los que fueron despedidos estaban incitando a la violencia (pidiendo a otros que traigan armas a la línea de huelga para detener a los rompehuelgas, etc.). Personalmente, no he visto una publicación o comentario de nadie con respecto a algo por el estilo".

En su declaración oficial, GM dejó en claro que está imponiendo castigos para intimidar a los trabajadores que se atrevan a resistir el régimen dictatorial dentro de las fábricas, el cual lo hará valer el UAW bajo los términos del nuevo contrato.

GM dijo a 7 Action News de Detroit: "Podemos confirmar que los empleados han sido despedidos de Flint debido a violaciones de la política de la compañía. Los miembros de nuestro equipo desempeñan un papel fundamental en nuestro éxito, y el nuevo acuerdo laboral de cuatro años reconoce esas importantes contribuciones con un paquete líder de salarios y beneficios en la industria. A medida que reiniciamos las operaciones, avanzamos como un equipo y nos mantenemos enfocados en nuestras prioridades de seguridad y en la construcción de vehículos de alta calidad para nuestros clientes".

El despido de los trabajadores de Flint sigue a la decisión de GM de despedir a nueve trabajadores militantes en su planta de Silao, México, que decidieron desafiar las demandas de la compañía y los sindicatos de aumentar la producción durante la huelga estadounidense. Los trabajadores de Silao fabrican los mismos camiones Silverado y Sierra que los trabajadores estadounidenses construyen en Flint y Ft. Wayne, Indiana.

Los trabajadores de Ford y Fiat Chrysler que se han opuesto a la traición del UAW en GM y quieren combatir las demandas de concesiones también están siendo victimizados. Un trabajador de Fiat Chrysler le dijo al Boletín de los Trabajadores Automotores: “Nos dijeron que nos despedirán si publicamos algo en las redes sociales o hablamos con otros trabajadores sobre el próximo contrato. En una reunión de la planta, dijeron que nosotros, los trabajadores de mayor antigüedad, estamos conspirando contra la empresa y el sindicato y nos avisaron que nos dan de baja por hablar con la generación más joven de trabajadores sobre el lenguaje de los convenios y el lenguaje contractual.

“No tenemos a quién recurrir porque el sindicato está permitiendo que la empresa haga lo que quiera con los trabajadores, independientemente de los acuerdos contractuales. El hostigamiento está fuera de control. También nos obligan a trabajar durante cada descanso y nos dicen que no reportemos las lesiones".

Los funcionarios del UAW International y el local 598 en Flint han reconocido que los despidos ocurrieron y dejaron en claro que no harán nada para combatir seriamente este intento descarado de intimidar a los trabajadores. "Todos los problemas se abordarán a través de nuestros sindicatos locales y el proceso de quejas de nuestros contratos que se aplicaron durante el paro laboral", dijo el UAW International en un comunicado a los medios de comunicación locales.

La realidad es que el UAW apoya que la compañía utilice a los trabajadores militantes como ejemplo. Durante la huelga, el UAW aisló deliberadamente a los trabajadores de GM, manteniendo a más de 100.000 trabajadores de Ford y Fiat Chrysler en el trabajo a pesar del uso de rompehuelgas por parte de GM, incluso en Flint. Muy conscientes de que enfrentaría una oposición generalizada, los funcionarios sindicales locales en Spring Hill, Tennessee, llamaron a la policía contra los trabajadores que se oponían al contrato entreguista. Atropellando los derechos democráticos de los trabajadores, el UAW se apresuró a realizar una serie de votos de ratificación antes de que los trabajadores tuvieran tiempo suficiente para estudiar y discutir el acuerdo tentativo, y luego anunció que el acuerdo había sido aprobado por un margen de 56 a 44 por ciento, gracias a una gran mayoría que supuestamente votó a favor en plantas como Flint, donde los trabajadores denuncian que hubo una manipulación de votos.

Los trajadores tienen todo el derecho de decir lo que piensan y usar las redes sociales para organizar su oposición, libres del espionaje de las corporaciones y el UAW. Ese derecho está garantizado por la Primera Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos. También forma parte de la cláusula de 1935 de la Ley Nacional de Relaciones Laborales (NLRB) de "Actividad concertada protegida", que garantiza el derecho de los trabajadores "a actuar juntos para tratar de mejorar sus salarios y condiciones de trabajo, con o sin sindicato".

Después de recibir muchas protestas de los trabajadores quejándose de que se estaban violando sus derechos, en 2012 la NLRB descubrió que varios empleadores, incluyendo General Motors, habían violado ilegalmente la ley laboral federal a través de su política restrictiva en redes sociales. GM dijo que, a pesar de las recomendaciones de la NLRB, la compañía no estaba cambiando su política, insistiéndole que "cumpla con las leyes relevantes".

En cambio, el UAW ha defendido las normas antidemocráticas del uso de las redes sociales que impone GM, que "incluyen publicar o reenviar publicaciones que contengan rumores, declaraciones maliciosas o comentarios negativos hacia GM o cualquiera de sus empleados, tal como se encuentra en nuestra Norma 30 de la Tienda de acuerdos locales", escribe un sindicato local.

Los trabajadores deben exigir la reincorporación de todos los trabajadores victimizados, desde Flint a Silao, México. El UAW no garantizará ninguna lucha contra los despidos y las represalias contra los trabajadores militantes ni la defensa del derecho a la libre expresión y la resistencia colectiva. Solo se puede luchar mediante la creación de comités de base en cada fábrica, independientes del corrupto UAW, para movilizar a todos los trabajadores en oposición a la dictadura de la gerencia y el sindicato en las fábricas.

El Boletín de los Trabajadores Automotores insta a los trabajadores a que participen en la llamada en línea el jueves a las 7 p.m., hora del este, para discutir las lecciones de la huelga de GM. Regístrate en: wsws.org/autocall.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 29 de octubre de 2019)