Los casos confirmados del coronavirus en Estados Unidos aumentaron un 17% durante las dos semanas previas al fin de semana festivo del 4 de julio, cifras que desmienten la actual campaña del gobierno de Biden y de los medios de comunicación estadounidenses para declarar la 'independencia' del país de la pandemia.

Al igual que en otros muchos países, como Rusia, Sudáfrica y el Reino Unido, la nueva propagación de la enfermedad en EE.UU. ha sido causada por la variante Delta. Un análisis del Financial Times señala que se estima que 'tres de cada cinco casos a nivel nacional' son por infecciones de la nueva variante. En algunos estados, las proporciones son aún peores: el 90% de los casos en Missouri son de la variante Delta, el 89% en Arkansas, el 87% en Utah, el 79% en Kansas y el 78% en Colorado, así como el 72% en California, el 69% en Texas y el 65% en Nueva York.

En palabras del director general de la Organización Mundial de la Salud, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, 'estamos en un periodo muy peligroso de esta pandemia. ... El Delta se ha detectado en al menos 98 países y se está extendiendo rápidamente en países con baja y alta cobertura de vacunación'.

Tales comentarios contrastan con las acciones de Biden durante el fin de semana, que han consistido en visitar el Festival Nacional de la Cereza de Traverse City y en hacer una parada para tomar un helado, todo ello mientras promovía la mentira de que 'Estados Unidos ha vuelto a estar unido' y que la pandemia ha llegado esencialmente a su fin. El presidente también está organizando un evento para 1.000 personas en la Casa Blanca, dando un visto bueno implícito a otros eventos de este tipo en todo el país. La primera dama, Jill Biden, declaró en un mitin: '¿No huele el aire mucho mejor sin nuestras mascarillas?'.

El Coordinador de Respuesta al Coronavirus de Biden, Jeff Zients, hizo un comentario particularmente insensible, afirmando que el país tiene 'mucho que celebrar'. Sin duda, los oligarcas de Wall Street y los ejecutivos de las empresas estarán celebrando el mercado bursátil, donde el Promedio Industrial Dow Jones ha aumentado en unos 5.000 puntos desde enero. La clase trabajadora, en cambio, independientemente de las celebraciones inmediatas que se hagan, está recordando los casi 35 millones de casos de la pandemia en Estados Unidos y los más de 621.000 muertos.

Además, la propagación de la variante Delta ha suscitado muchas preocupaciones por la disminución de las tasas de vacunación en todo el país. Los CDC calculan que 156 millones de personas están totalmente vacunadas en Estados Unidos, algo menos del 47%, y que aproximadamente dos tercios han recibido al menos una dosis. Y un reciente informe de la Kaiser Family Foundation descubrió que muy pocos de los que no se han vacunado planean hacerlo actualmente.

En otras palabras, por una combinación del hecho de que se permitió que la pandemia se extendiera tanto y mutara tanto en primer lugar y de las concepciones anticientíficas y el atraso cultural de la población engendrados por la élite gobernante estadounidense, las vacunas contra el coronavirus no serán suficientes para detener la pandemia.

El repunte en Missouri, en particular, subraya los peligros de la variante Delta, ya que las hospitalizaciones en algunas zonas han aumentado hasta un 225% desde el 1 de junio. De los hospitalizados, el 37% tiene menos de 45 años, y los nuevos casos diarios se han duplicado desde mayo. 'Missouri es más o menos el epicentro de la variante Delta en EE.UU. en este momento', dijo Alexander Garza, funcionario de salud del área de San Luis, al Financial Times. Sólo el 39% de la población de Missouri se ha vacunado completamente.

Y como muestra la situación internacional, lo que está ocurriendo ahora en EE.UU. es sólo el precursor de lo que está por venir. Ahora hay más de 23.000 casos diarios en el Reino Unido y en aumento, más de 10 veces el recuento de casos antes de que la variante Delta comenzara a propagarse. Las muertes en Gran Bretaña también han empezado a aumentar, duplicándose en el último mes hasta llegar a 17 diarias.

Las hospitalizaciones en el Reino Unido también están aumentando. El Dr. Eric Feigl-Ding señaló en Twitter que 'las hospitalizaciones en Inglaterra debido a la #VarianteDelta se están acelerando ahora hacia arriba incluso más rápido que antes, según los nuevos datos recopilados por @COVID19actuary'. Los ingresos hospitalarios se dispararon por encima de los 250 diarios a finales de junio, los niveles más altos desde marzo, a pesar de que aproximadamente la mitad de la población está totalmente vacunada.

En Rusia, los nuevos casos se han triplicado desde principios de junio, y las muertes se han disparado hasta 654, casi el doble, en el mayor aumento de muertes conocido en ese país desde que comenzó la pandemia. Como consecuencia de la propagación, el país ha empezado a exigir la vacunación a quienes trabajan en oficinas gubernamentales, atención sanitaria, educación, comercio minorista y otros sectores de servicios.

El aumento de casos en Sudáfrica es uno de los más preocupantes. Los recuentos diarios de casos desde abril se han multiplicado casi por 19 y han superado los picos de enero. A esto le ha seguido un aumento de las muertes, con 247 casos diarios, cuatro veces más que en abril y mayo. Menos del 1% de la población del país está totalmente vacunada, según Our World in Data (Nuestro Mundo en Datos).

Muchos otros países se enfrentan a una situación similar, lo que llevó al Dr. Tedros a renovar el viernes su llamamiento para 'compartir equitativamente los equipos de protección, el oxígeno, las pruebas, los tratamientos y las vacunas' con el fin de salvar vidas en todo el mundo. También dejó clara la necesidad permanente de adoptar medidas epidemiológicas fundamentales. 'Las medidas sociales y de salud pública, como una fuerte vigilancia, la realización de pruebas estratégicas, la detección precoz de casos, el aislamiento y la atención clínica siguen siendo fundamentales, así como el enmascaramiento, la distancia física, evitar los lugares concurridos y mantener las zonas interiores bien ventiladas son la base de la respuesta'.

Estas medidas siguen siendo fundamentales, sobre todo porque la investigación científica sigue demostrando que el coronavirus se transmite por el aire y se propaga con facilidad. Un artículo publicado en Infection & Chemotherapy rastreó la transmisión a través de dos personas que visitaron el mismo cuarto de baño sin ventilación con 40 minutos de diferencia y realizó un seguimiento con imágenes de CCTV y la secuenciación genómica del virus, lo que confirma aún más lo infeccioso que es el coronavirus, especialmente las variantes, y lo necesarias que son las medidas de salud pública para salvar vidas.

Los trabajadores y los jóvenes deben estar atentos, especialmente cuando se ven obligados a volver a los lugares de trabajo y a las escuelas en las fases finales de la campaña de reapertura de los gobiernos de Estados Unidos y del mundo entero. La pandemia de coronavirus está lejos de haber terminado y las celebraciones oficiales de este fin de semana pretenden tanto disimular el inmenso sufrimiento de los últimos 18 meses como ocultar los peligros de las semanas y meses venideros.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 4 de julio de 2021)