La variante Delta de COVID se está propagando rápidamente en las plantas de Dana, poniendo nuestras vidas y las vidas de nuestros seres queridos en riesgo de muerte o debilidad de por vida. La corporación cerrará la producción cuando se quede sin piezas, pero no por brotes de COVID. A los ojos de la empresa, el UAW y el USW, un trabajador muerto puede ser reemplazado, pero la falta de un eje no puede serlo.

No deberíamos estar trabajando en absoluto en este momento. El UAW y el USW continúan extendiendo el antiguo contrato incluso después de que votamos 90 por ciento “no” para repudiar las condiciones de los talleres de explotación. Nos están obligando a trabajar horas extras obligatorias en medio de una pandemia mortal para ayudar a la corporación a almacenar piezas. En muchas de nuestras plantas, estamos almacenando piezas a pesar de que las plantas de ensamblaje que las usan están cerradas debido a la escasez de microchips.

El UAW y el USW llegaron a un acuerdo con Dana hace semanas o meses. Lo que quieren imponer no es un “contrato”; es un pase libre de cinco años para que la corporación haga lo que quiera. Cada vez más trabajadores consideran que una huelga es necesaria. La compañía es vulnerable y las líneas de suministro están tan interconectadas que tenemos un tremendo poder potencial. La empresa y los sindicatos están jugando con el tiempo y haciéndonos arriesgar nuestras vidas para construir una reserva y debilitar nuestra posición.

¡La propagación de COVID dentro de las plantas hace que nuestra situación sea aún más urgente! ¡Los trabajadores debemos tomar la iniciativa, o morirán trabajadores! El Comité de Base de los Trabajadores de Dana hace un llamado a los trabajadores de todo el mundo para que construyan comités de huelga de base para movilizar a todos los trabajadores en cada planta en apoyo de:

1. Un cierre inmediato de todas las plantas para detener la propagación del COVID.

2. La publicación inmediata de información de casos de COVID diariamente, en cada planta.

3. Pago de salarios completos durante cualquier cuarentena.

4. Un contrato con una semana de 40 horas, una jornada de 8 horas y un aumento salarial del 75 por ciento.

El UAW, USW y Dana están reteniendo información sobre el número de casos de COVID para mantenernos trabajando, al igual que retuvieron el contrato para tratar de que lo aceptáramos. Pero aquí está la realidad mortal:

Los casos están en aumento en muchas plantas de Dana. Los trabajadores reportan 63 casos activos en las instalaciones de Dana en Dry Ridge, Kentucky. Actualmente hay 9 casos activos en la planta en Warren, Michigan, y los casos están aumentando dentro de la planta a un ritmo más rápido que en la ciudad circundante. También hay informes de aumento de casos y propagación comunitaria en Fort Wayne, Indiana; Danville, Kentucky y Crossville, Tennessee.

Al mantener las plantas abiertas, Dana y los sindicatos están poniendo en riesgo a nuestras familias y a toda la comunidad. En casi todos los condados donde se encuentra una planta de Dana, los casos de COVID están en aumento como nunca antes. Los casos están en su punto máximo en Dry Ridge, Henderson, Louisville y Danville en Kentucky, así como en París, Humboldt y Crossville en Tennessee. Los casos están aumentando en Lima y Toledo en Ohio; Fort Wayne, Indiana; Columbia, Misuri; Pottstown, Pensilvania y Warren, St. Clair y Auburn Hills en Michigan.

El sistema de salud no puede soportar más casos. En siete plantas de Dana en Kentucky y Tennessee, la utilización de camas de UCI dentro de un radio de 30 millas de las plantas está muy por encima del promedio nacional del 82 por ciento. Para la planta de Louisville, la utilización de la UCI es del 110 por ciento. Para tres plantas: Danville, Kentucky; Gordonsville, Tennessee; y Crossville, Tennessee: hay menos de 10 camas de UCI disponibles dentro de un radio de 30 millas (48 km).

La empresa y los sindicatos nos están sacrificando por los beneficios. Trabajar horas extras significa solaparse con el siguiente turno, lo que aumenta drásticamente la probabilidad de que las infecciones se propaguen en todos los turnos y departamentos.

Los esfuerzos para “mitigar” la propagación de la pandemia, incluso a través del uso de mascarillas y la vacunación, no son suficientes para proteger nuestras vidas. Mientras las plantas estén abiertas, el virus se propagará. Nuestras plantas están mal ventiladas, sin aire acondicionado adecuado, lo que significa que las partículas se sientan en el aire y se propagan a cada línea de producción y a cada parte de la planta. Solo un cierre nos protegerá de la infección.

La clase dominante, incluidos sus representantes políticos Biden, Trump, el Partido Demócrata y el Partido Republicano, ha estado librando una campaña para obligarnos a los trabajadores a morir por ganancias corporativas. Están reabriendo nuestras escuelas, donde nuestros hijos se infectarán. Están frenando el pago de asistencia por desempleo y poniendo fin a la moratoria sobre los desalojos, todo para aumentar la presión sobre nosotros para que permanezcamos en el trabajo. Este es un ataque contra toda la clase trabajadora, en Dana y más allá, independientemente de su raza, nacionalidad o género. Mientras tanto, el mercado de valores se dispara y la riqueza de los milmillonarios nuevas alturas.

Sin embargo, incluso si logramos obligar a Dana y a los sindicatos a cerrar las plantas de la compañía, esto por sí solo no será suficiente para alterar la trayectoria de la pandemia, en condiciones en las que ambos partidos están reabriendo las escuelas y eliminando todas las restricciones restantes. Para eso, se necesita una nueva estrategia, basada en la movilización de la clase trabajadora contra el sacrificio de vidas para obtener ganancias. La pandemia, que no respeta las fronteras nacionales ni raciales, solo puede controlarse si la clase trabajadora se organiza para forzar la adopción de una estrategia, que incluye vacunas, rastreo de contactos y el cierre de la producción no esencial, para erradicar finalmente el virus.

El UAW y el USW han tratado de convencernos de que estamos aislados y que no podemos hacer nada para luchar contra las concesiones que la dirección está exigiendo. En realidad, los trabajadores de todo el mundo están buscando formas de luchar contra la decisión de las corporaciones y los Gobiernos de permitir que el virus se propague sin control en sus lugares de trabajo, escuelas y comunidades. Podemos y debemos hacer de nuestro propio movimiento la punta de lanza de un movimiento más amplio, atrayendo el apoyo de maestros, trabajadores de John Deere, trabajadores automotores en las plantas de GM, Stellantis, Ford y otras empresas.

¡Ya basta! Tenemos el poder de salvar nuestras vidas y las vidas de nuestros seres queridos. Para hacer cumplir los cierres y prepararse para una huelga, los trabajadores deben establecer comités de huelga de base para compartir información, garantizar la discusión democrática y preparar una acción común dentro de cada planta y en todas las plantas. ¡Llamamos a un cierre inmediato de todas las plantas de Dana con un pago completo de cuarentena para cada trabajador! No debemos vernos obligados a elegir entre la infección y el desahucio.

Únete al Comité de Base de los Trabajadores de Dana enviando un correo electrónico a danawrfc@gmail.com o un mensaje de texto al (248)602-0936.