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Tres días después de cancelar en el último momento una huelga contra Mack Trucks, el sindicato United Auto Workers, aún no ha publicado el contrato completo, que ha proclamado como una “gran victoria”.

Pero la poca información que el sindicato ha ofrecido a cuentagotas ya demuestra que el acuerdo es una descarada traición.

Los trabajadores de las fábricas de Mack en Macungie, Pennsylvania, y Hagerstown, Maryland, han compartido con el WSWS una página de “puntos destacados” del contrato distribuida por el sindicato el miércoles por la mañana.

Los “puntos destacados” incluyen un aumento salarial del 19 por ciento a lo largo de los cinco años de vigencia del contrato, incluyendo un 10 por ciento en el primer año. Este aumento del 10 por ciento no compensará la erosión de los salarios de los trabajadores por la inflación de los últimos tres años, que fue del 22 por ciento, según la Oficina de Estadísticas Laborales. Tras el aumento inicial del 10 por ciento, los salarios de los trabajadores de Mack aumentarán aproximadamente un 2,25 por ciento anual durante los cuatro años restantes, de nuevo por debajo del nivel actual de inflación.

El contrato provisional no incluye la cláusula COLA (ajuste del coste de la vida) y deja intacto el odiado sistema de niveles salariales, según el cual los trabajadores que realizan el mismo trabajo cobran salarios sustancialmente diferentes. Tanto el COLA como la eliminación de los niveles han sido demandas centrales de los trabajadores tanto de Mack como de las Tres Grandes.

En otras palabras, el contrato “récord” del UAW impone a los trabajadores de Mack un recorte salarial significativo en términos reales. Los trabajadores serán dentro de cinco años, en 2028, considerablemente más pobres de lo que eran hace cinco años, en 2018.

“El aparato del UAW sigue ocultando cosas sobre este contrato, pero sabemos lo suficiente para ver que pertenece a la basura”, dijo Will Lehman, trabajador de la planta de Mack Trucks en Macungie, Pensilvania, y candidato a presidente del UAW el año pasado.

“Insto a mis compañeros y compañeras a que el domingo emitan el mayor número posible de votos en contra, lo que enviará un poderoso mensaje de que no permitiremos que se nos imponga otra capitulación. Los trabajadores también deben seguir exigiendo que el UAW publique el contrato completo: tenemos derecho a conocer cada detalle de todas las concesiones que acordaron y que están intentando imponernos”.

Cada uno de los “puntos destacados” del UAW es tan ambiguo o trivial que no significa nada. Por ejemplo, la hoja dice no habrá ningún aumento en las contribuciones semanales al seguro médico, pero un trabajador enfadado señaló en una red social que el contrato no dice nada sobre las contribuciones a los planes médicos HMO. También promete una contribución anual de $1.000 a las cuentas de pensiones 401(k), para los trabajadores que no cuentan con una cobertura médica como parte de su jubilación.

Algunos de los otros “puntos destacados” son sencillamente irrisorios. El contrato promete una semana más de vacaciones pagadas al año, pero solo para los empleados que hayan trabajado para Mack entre seis meses y tres años. El contrato también proclama que garantizará “una mayor ayuda para el calzado de seguridad”. No dice cuánto aumentará este “subsidio”, ni explica por qué los trabajadores deben pagar su propio equipo de seguridad para comenzar.

El primer punto destacado en la lista es una bonificación por firma de 3.500 dólares. Su ubicación no es casual. Ese es el procedimiento habitual del UAW para sobornar a los trabajadores en apuros económicos a firmar una basura de contrato. Como señaló un trabajador en las redes sociales, para la mayoría de los trabajadores los impuestos reducirán la miserable bonificación en un tercio.

El UAW emitió una carta el lunes en la que daba su pleno apoyo al miserable acuerdo, escribiendo: “El Consejo de Mack Trucks respalda plenamente este acuerdo provisional récord y espera presentarlo a los miembros”.

“Ya lo he decidido, voy a votar no”

Los trabajadores mostraron su indignación ante los puntos destacados en las redes sociales y en sus comentarios al W orld Socialist Web Site.

“Ya lo he decidido, voy a votar no”, dijo un veterano trabajador de Mack en la planta de Macungie, Pennsylvania, al WSWS. “Ya tengo suficiente información para tomar esa decisión. Es simplemente terrible”.

“Nos mantienen desinformados, eso es lo que más me disgusta de todo este asunto”.

“Nos están traicionando. Ni siquiera se acerca a lo que queríamos, en mi opinión. Creo que la mayoría de la gente en Mack no está cayendo en sus tácticas”.

Un trabajador de un centro de distribución de partes de Mack en Jacksonville, Florida, le dijo al WSWS, “Lo que estamos viendo no es lo que buscábamos. No estamos satisfechos. Dijo que el aumento del 10 por ciento inicial no compensa el aumento del coste de vida y que los “aumentos” del último contrato fueron absorbidos por la inflación.

En 2019, el UAW impuso forzosamente un contrato entreguista en Mack tras detener una huelga de 12 días incluso antes de que los trabajadores pudieran votar sobre el acuerdo. El contrato mantuvo el sistema de niveles salariales e incluía un aumento salarial de solo el 6 por ciento, muy por debajo a la inflación.

“Queremos ver el contrato, que nos enseñen todos los cambios que quiere la empresa: todo lo que nos dan y todo lo que nos quitan. ¿Una bonificación de 3.500 dólares? ¿Qué es eso? Quieren exhibir ese dinero para cegar a la gente”.

Rick, miembro del Comité de Base de Volvo Trucks en la planta hermana de Mack en Dublín, Virginia, dijo: “No se dejen llevar solo por los puntos destacados. No te contarán todo lo que te están quitando hasta que sea demasiado tarde. No se dejen intimidar para que tomen una decisión rápida y voten. Revisen todo el contrato. El diablo está en los detalles”.

Los trabajadores de la planta de Volvo New River Valley, en Virginia, llevaron a cabo una lucha encarnizada en 2021, haciendo dos huelgas y rechazando tres contratos propatronales respaldados por el UAW. Rick señaló que los trabajadores de su planta “están observando intensamente lo que hacen los trabajadores de Mack, así que esperemos que puedan conseguir una victoria”.

El UAW está intentando imponer las demandas de Mack tras bloquear el domingo una huelga que contaba con el apoyo del 98 por ciento de los trabajadores.

Diez minutos antes de que expirara el contrato anterior con Mack a medianoche del domingo, y cuando los trabajadores del turno de noche ni siquiera habían comenzado sus viajes a la planta, el UAW anunció un acuerdo de “última hora”.

En lugar de publicar el contrato completo, como habían exigido los trabajadores, la burocracia planea celebrar una “reunión informativa de ratificación” el sábado, en la que pretende presentar a los afiliados sus “puntos destacados” cuidadosamente seleccionados antes de una votación relámpago el domingo.

El evidente objetivo del sindicato, sin duda acordado entre el nuevo presidente del UAW, Shawn Fain, y la Casa Blanca, es aplastar a la oposición e impedir que los trabajadores de Mack se unan a los trabajadores de las Tres Grandes en huelga, cuya lucha el aparato del UAW intenta sofocar mediante un puñado de “huelgas stand up” o “de pie” aisladas. La política de guerra del Gobierno de Biden depende de la supresión de la lucha de clases en EE.UU. en general, y en la industria automotriz en particular, incluyendo la producción ininterrumpida en Mack, que también fabrica vehículos militares pesados.

Un rechazo masivo, un “no” al acuerdo entreguista del UAW es necesario, pero solo es el primer paso. Al presentar este miserable acuerdo a los miembros, la burocracia sindica ha demostrado que no tiene el más mínimo interés ni intención de satisfacer las demandas de los trabajadores. Por mucha presión que se ejerza sobre el “comité de negociación” que ha presentado un acuerdo tan descaradamente favorable a la empresa, es imposible hacer que cambie de rumbo.

Para tomar el control de la lucha, los trabajadores deben unirse y expandir el Comité de Base de los Trabajadores de Mack, y unirse a la creciente red de comités de base en toda la industria automotriz.

El trabajador de Mack en Florida dijo que apoyaba el llamamiento de la Red de Comités de Base de los Trabajadores Automotores a una huelga de toda la industria automotriz. “Demuestra más solidaridad cuando todo el mundo actúa a la vez. Es como un efecto dominó”.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 4 de octubre de 2023)