Español

Los partidos pseudoizquierdistas de España desvían la ira por el genocidio de Gaza detrás del gobierno PSOE-Sumar

Durante casi dos meses, millones de personas han protestado internacionalmente exigiendo el fin del genocidio en Gaza desatado por Israel con el pleno apoyo de los Estados Unidos y las potencias europeas. El surgimiento de un movimiento global marca una etapa histórica en la lucha de clases. Objetivamente, enfrenta a las masas de trabajadores y jóvenes contra todos los gobiernos capitalistas que apoyan a Israel, incluido el gobierno en

España del Partido Socialista (PSOE)-Sumar del recientemente elegido presidente del gobierno Pedro Sánchez.

El presidente del Gobierno español del PSOE, Pedro Sánchez, la ministra de Economía y vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calvino, y la ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda de Sumar, Yolanda Díaz, en el Parlamento español en Madrid, España, el viernes 29 de septiembre de 2023. [AP Photo/Bernat Armangue]

En España, decenas de miles de manifestantes han salido a las calles de Madrid, Barcelona y otras ciudades para oponerse a este genocidio. En respuesta a la creciente indignación, el gobierno PSOE-Sumar ha organizado una cínica maniobra, continuando en la línea de su predecesor el gobierno PSOE-Podemos. Adoptando una postura crítica sobre los crímenes israelíes, ha seguido tranquilizando a Israel sobre su asociación. Es otra denuncia demoledora del militarismo imperialista del partido pseudoizquierdista Podemos, ahora parte de la coalición Sumar.

En octubre, poco después de que el gobierno israelí permitiera a Hamás lanzar su ataque del 7 de octubre para crear un pretexto para un genocidio largamente planeado contra el pueblo de Gaza, Podemos acusó a Israel de cometer crímenes contra la humanidad. Pero el objetivo era ocultar el hecho de que su propio gobierno había proporcionado millones de dólares en armas al gobierno israelí que ahora se utilizan contra la población palestina.

Bajo el gobierno PSOE-Podemos, las relaciones comerciales se dispararon hasta alcanzar un récord de 3.100 millones de euros. Solo en 2022, 2.558 empresas hicieron exportaciones a Israel, y el valor de sus bienes y servicios alcanzó la cifra récord de €2.100 millones, lo que supone un aumento del 20,2% en comparación con el año anterior. Algunas de las mayores corporaciones españolas están presentes en Israel, como Sacyr, Indra, Acs y Comsa. Las importaciones procedentes de Israel alcanzaron los 1.000 millones de euros.

El comercio de armas entre Madrid y Tel Aviv también floreció. Entre 2020 y 2022, Israel importó €140 millones en armamento, mientras que España gastó cientos de millones en la compra de armas a Israel etiquetadas con la marca de 'probado en combate'. Su uso probado contra los palestinos las hace más valiosos y fiables para las fuerzas armadas españolas.

En junio, los dos países celebraron el 'V Diálogo Estratégico España-Israel' presidido por el general de división retirado Amos Yadlin, ex jefe de la Inteligencia Militar de Israel. Entre los participantes se encontraban altos cargos de los ministerios de Asuntos Exteriores y de Defensa de España e Israel, de las Fuerzas de Defensa de Israel y de la Oficina del Presidente del Gobierno PSOE-Podemos.

El diálogo concluyó con el discurso principal del presidente del partido Nueva Esperanza y presidente del Grupo Parlamentario de Amistad Israel-España de la Knesset, Gideon Sa'ar, quien desde entonces se ha unido al gobierno de emergencia de extrema derecha de Netanyahu formado para implementar la limpieza étnica en Gaza. Poco después, España compró a Israel 1.680 misiles antitanque Spike LR2 por valor de €287 millones.

Tras la sublevación palestina del 7 de octubre, cuando Podemos se oponía nominalmente al conflicto, su propio gobierno envió a la fragata española Méndez Núñez y al buque de aprovisionamiento militar Patiño para que se unieran al grupo de batalla del portaaviones USS Gerald R. Ford. El portaaviones está actualmente desplegado en el Mediterráneo oriental para proporcionar apoyo estadounidense a la guerra israelí en Gaza, respaldando las amenazas de Estados Unidos de bombardear en el Líbano, Siria, Irak o Irán a las fuerzas que podrían tratar de intervenir militarmente para ayudar a los palestinos.

Mientras continuaban las protestas masivas en España y en toda Europa, los primeros signos de la intervención de la clase obrera internacional contra el genocidio aterrorizaron al gobierno del PSOE y Podemos. En Bélgica, los sindicatos aeroportuarios pidieron a los trabajadores que no manipularan los envíos de armas a Israel. En Barcelona, 1.200 trabajadores portuarios anunciaron que se negarían a dar servicio a cualquier barco que transportara material para abastecer la guerra del gobierno de Netanyahu. En Ferrol, los trabajadores de la empresa pública de astilleros Navantia denunciaron el envío de buques de guerra españoles y exigieron su retorno inmediato y el fin de todas las relaciones comerciales y diplomáticas con Israel.

Sánchez reaccionó viajando a Israel y Egipto, donde dijo: “La matanza indiscriminada de civiles inocentes, incluidos miles de niños y niñas, es totalmente inaceptable”. Al mismo tiempo, defendió el 'derecho de Israel a defenderse', el mantra universal utilizado para apoyar el genocidio de Gaza.

Desde entonces, Israel ha llamado a consultas a su embajadora en Madrid sobre lo que el ministro de Relaciones Exteriores, Eli Cohen, calificó de declaraciones 'vergonzosas' de Sánchez, después de que este último dijera que dudaba que Israel respetara el derecho internacional y repitiera que la acción militar en la Franja de Gaza no era aceptable.

El viernes pasado, en medio de una escalada diplomática entre España e Israel y mientras las bombas volvían a llover sobre Gaza tras la 'pausa humanitaria', Sánchez habló por teléfono con el exlíder de la oposición y ahora ministro del gabinete israelí Benny Gantz. Le aseguró a Gantz que respaldaba a Israel, afirmando después: 'Una vez más, he condenado los atentados terroristas de Hamás del pasado 7 de octubre ', antes de agregar: ' he reafirmado que España considera insoportable la muerte de civiles en Gaza”.

Gantz dijo que puso al día a Sánchez sobre la guerra, enfatizando que 'el terrorismo de Hamás debe ser desmantelado en Gaza '.

La pseudoizquierda interviene para desviar la ira

En estas condiciones, los partidos pseudoizquierdistas de la clase media acomodada están protegiendo a Podemos y Sumar bloqueando un movimiento de la clase obrera contra el gobierno capitalista español.

La morenista Corriente Revolucionaria de Trabajadores y Trabajadoras (CRT) —filial española del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) de Argentina y de Revolución Permanente en Francia— y el grupo Izquierda Revolucionaria (IR) —la antigua filial española del Comité por una Internacional de los Trabajadores— hacen ciertas críticas a Sumar/Podemos. Pero todo lo que escriben está dictado por un objetivo: evitar que los trabajadores lleguen a la conclusión de que Podemos y Sumar son partidos reaccionarios y partícipes de un gobierno que respalda al régimen genocida israelí y que debe ser derribado.

Todos ellos afirman que la presión 'desde abajo' puede hacer que el gobierno PSOE-Sumar dé un giro de 180 grados para oponerse a su propio apoyo al genocidio de Israel y liderar un movimiento contra su propia política a favor de la guerra. Afirman que el principal vehículo para presionar al gobierno es la burocracia sindical, que está atada al sistema capitalista y al gobierno PSOE-Sumar por mil hilos.

En 'Pedro Sánchez se reúne con Netanyahu y blanquea el genocidio sionista', el miembro de la Ejecutiva de IR, Víctor Taibo, lamenta la 'vergonzosa' reunión entre Sánchez y el presidente del Gobierno israelí, Benjamín Netanyahu. Se queja de que “en vez de cortar todo tipo de relaciones diplomáticas, económicas y militares con el Estado de Israel, que es lo que estamos exigiendo la izquierda y los movimientos sociales en las calles, se haga justo lo contrario.”

Taibo aconseja a Sumar y Podemos intensificar su retórica, preocupado de que estén desacreditándose rápidamente ante los ojos de los trabajadores y la juventud. “Que Sumar, [la estalinista Izquierda Unida] IU, PCE o Más País, con Podemos ya fuera del Gobierno, mantengan un silencio cómplice frente a esta visita es absolutamente lamentable e injustificable. El hecho de que una de las nuevas ministras designada por Izquierda Unida, Sira Rego, sea palestina no ha cambiado un ápice la situación.” [énfasis añadido]

En un artículo titulado 'Hipocresía imperialista: el gobierno español gasta millones de euros en misiles israelíes', Irene Olano, miembro de la CRT, afirma: “La actitud de Pedro Sánchez se desvela así como una impostura más que no pondrá una sola piedra en la línea de parar el genocidio. Es necesario romper relaciones económicas, diplomáticas y militares con el Estado genocida de Israel, así como exigir la inmediata retirada de tropas en el Líbano, donde el ministerio de defensa mantiene un destacamento para ayudar a Israel con el conflicto con Hezbolá”.

Olona, al igual que Taibo, promueven la ficción política de que los sindicatos se movilicen contra el gobierno PSOE-Sumar para revertir su apoyo a Israel. Afirma: “Es necesario impulsar una movilización masiva y que todos los sindicatos, organizaciones de izquierda y movimientos sociales se pongan en pie para exigir el fin del genocidio y para denunciar la complicidad del gobierno español con él. El gobierno español debe romper todos los pactos y posicionarse a favor del derecho de autodeterminación de Palestina. [énfasis añadido]”.

El historial del PSOE y sus aliados Sumar y Podemos es irrefutable. No están cometiendo errores 'lamentables e injustificables', sino que lideran un gobierno de la OTAN que ha gastado vastos recursos en llevar a cabo una guerra contra Rusia en Europa del Este, ha ordenado a los buques de guerra que se unan al grupo de batalla liderado por Estados Unidos en el Mediterráneo oriental y está aumentando enormemente el presupuesto militar mientras organiza rescates para los principales bancos y corporaciones. Al sentarse dentro de un gobierno que está instigando el genocidio israelí en Gaza, primero Podemos y ahora Sumar se han hecho cómplices.

En cuanto al intento de la CRT y de IR de dotar a la burocracia sindical española de la más mínima intención de oponerse al apoyo del gobierno PSOE-Sumar a Israel, ocurre justo lo contrario. Apoyan abiertamente la guerra israelí contra Gaza.

El líder de la Unión General de Trabajadores (UGT), Pepe Álvarez, se ha sumado a las concentraciones de apoyo a Israel frente a la embajada israelí convocadas por grupos prosionistas y se ha reunido con el embajador israelí para denunciar los 'ataques de Hamás' del 7 de octubre. Asociada al gobernante PSOE, la UGT tiene una larga relación con el principal sindicato corporativista israelí, la Histadrut (Federación General de Trabajadores de la Tierra de Israel), que es un pilar del régimen de apartheid israelí, que apoya plenamente los ataques militares contra Gaza y los países vecinos.

El mayor sindicato de España, Comisiones Obreras (CCOO), vinculado a Sumar, ha hecho algunas declaraciones pidiendo el fin de la guerra, pero se ha negado a llamar a sus miembros en las principales industrias bélicas, aeropuertos y puertos españoles para que detengan la transferencia de armas a Israel.

Esto continúa su papel durante la actual guerra de la OTAN contra Rusia en Ucrania, en la que tanto CCOO como UGT han respaldado al imperialismo español y al gobierno capitalista PSOE-Podemos, llamando a los trabajadores a realizar paros laborales de cinco minutos para apoyar al régimen de extrema derecha y pro-OTAN en Ucrania. El gobierno PSOE-Podemos, por su parte, envió tanques, baterías antiaéreas, proyectiles de artillería y otras municiones a Ucrania, que también llegaron al batallón neonazi Azov.

El apoyo a la guerra imperialista en el extranjero está enlazado con su traición a la guerra de clases en casa. Las burocracias de UGT y CCOO han actuado como herramientas de la clase capitalista, trabajando con el gobierno para imponer salarios por debajo de la inflación y aislar y estrangular sistemáticamente las huelgas. Permitieron que el anterior gobierno PSOE-Podemos enviara vehículos blindados contra los trabajadores del metal en huelga, prohibiera las huelgas utilizando severas leyes de servicios mínimos y desplegara decenas de miles de policías contra una huelga nacional de tres semanas de los camioneros.

La promoción solapada de la CRT y de IR de Sumar y la burocracia sindical refleja su hostilidad pequeñoburguesa a la construcción de un movimiento políticamente independiente en la clase obrera. La verdadera lucha contra el imperialismo y sus políticas de genocidio y guerra significa la lucha por la independencia política de la clase obrera, no solo de los partidos capitalistas como Sumar y Podemos, sino de sus lacayos en la burocracia sindical.

Un poderoso movimiento contra la guerra en la clase obrera, que incluye acciones directas para impedir la producción y el transporte de armas para Israel, está indisolublemente ligado a una rebelión contra el aparato sindical y a la transferencia del poder a las bases. Luchar para construir un movimiento de este tipo también requiere construir un partido marxista, internacionalista, es decir, trotskista, en la clase obrera para oponerse a gobiernos capitalistas reaccionarios como la coalición PSOE-Sumar en España. Esto significa construir secciones del Comité Internacional de la Cuarta Internacional en España y a nivel internacional.

(Publicado originalmente en inglés el 5 de diciembre de 2023)

Loading