En una carta dirigida a los Institutos Nacionales de Salud que se hizo pública el jueves, el zoólogo Peter Daszak, de EcoHealth Alliance, refutó las afirmaciones de que su organización no mantuvo informado al gobierno estadounidense de las investigaciones sobre el coronavirus realizadas en el Instituto de Virología de Wuhan.

Durante toda una semana, Daszak y su organización, que lleva a cabo una investigación vital sobre los orígenes ecológicos de las enfermedades infecciosas, han sido objeto de una campaña mediática calumniosa, basada en la acusación sin fundamento del subdirector principal de los Institutos Nacionales de Salud (NIH), Lawrence Tabak, de que EcoHealth no divulgó 'de inmediato' los resultados de la investigación sobre el coronavirus.

Tabak hizo esta afirmación sin tratar de verificarla con EcoHealth, y no respondió a las solicitudes de comentarios ni de EcoHealth ni del Wall Street Journal, que publicó la carta de Daszak.

La carta de Tabak era una respuesta a los legisladores republicanos que promovían el bulo de que el Sars-CoV-2, el virus que causa el COVID-19, fue creado a través de una investigación de 'ganancia de función' en el WIV de China con fondos concedidos por los Institutos Nacionales de Salud a la alianza EcoHealth.

Las afirmaciones sin fundamento de Tabak fueron refutadas por la bien documentada carta de Daszak. 'EcoHealth cumplió de hecho con todos los requisitos de información', escribió el Dr. Daszak. 'Si los NIH nos hubieran indicado en algún momento que alguna cuestión necesitaba más aclaración, por supuesto habríamos cumplido inmediatamente con cualquier petición'.

Daszak afirma que los documentos que presentó a los NIH 'demuestran claramente que EcoHealth Alliance no incumple nuestras obligaciones de supervisión e información, y que de hecho informó de este experimento hace más de 3 años y 6 meses.'

Según Daszak, los NIH alegaron que un experimento realizado en 2018 no fue reportado a los NIH hasta 2021. Pero la carta de Daszak proporciona una captura de pantalla de un informe anual de 2018 del experimento, que muestra que, de hecho, fue documentado a tiempo.

Los administradores de los NIH, hasta ahora, no han proporcionado ninguna explicación para lo que parecen ser declaraciones descaradamente inexactas, que no hicieron ningún esfuerzo para confirmar o verificar con EcoHealth. Se desconocen sus motivaciones para hacer estas declaraciones, pero es posible que, al enfrentarse a una despiadada campaña de la derecha, hayan decidido desviar la culpa hacia una pequeña organización sin ánimo de lucro.

En un párrafo final, Daszak escribe

Nos gustaría señalar que este tipo de errores sobre el momento o la naturaleza de nuestra información se pueden abordar mejor poniéndose en contacto con nosotros para solicitar una aclaración antes de responder a cualquier investigación del Congreso. Esto ayudará a garantizar respuestas objetivamente correctas y evitará a nuestra organización y a nuestro personal el descrédito indebido y la acusación injustificada de comportamiento inapropiado que se ha producido ahora en la prensa. Creemos que es muy importante que las impresiones que la investigación del Congreso pueda extraer de la información incorrecta que se les ha proporcionado se aborden con rapidez y claridad.

De hecho, la carta de los NIH provocó un frenesí mediático, en el que los medios de comunicación, incluido el Washington Post, no se esforzaron por comprobar la veracidad de las afirmaciones de Tabak antes de darlas por ciertas. El Post, en un editorial publicado a principios de esta semana, escribió:

La semana pasada se dio a conocer que la Alianza Ecosanitaria presentó en agosto un informe sobre su investigación en 2018-2019: el informe llevaba dos años de retraso. Esto coincide con el período de dos años de la pandemia y el intenso debate sobre los orígenes del virus.

Esta campaña mediática ha tenido un efecto desorientador en el público, incluidos los científicos con principios que se han opuesto a la mentira del laboratorio de Wuhan. En respuesta a la carta, la viróloga Angela Rasmussen sugirió que EcoHealth ocultó 'datos a la agencia gubernamental que financia su trabajo con el dinero de los contribuyentes'.

Pero Rasmussen modificó estas afirmaciones en respuesta a las preguntas del WSWS, escribiendo: 'Mi declaración anterior se basaba en la carta de Tabak. Ahora he reconocido que EcoHealth lo discute, cosa que no sabía en ese momento'.

Y añadió: 'Los NIH no han respondido más que para decir que mantienen la carta del Dr. Tabak. Deberían responder a las afirmaciones de EHA. Si los NIH metieron la pata y no se comunicaron con la EHA, deberían revelarlo y explicarlo'.

La carta de Daszak fue publicada por el Wall Street Journal, en una noticia con hechos titulada 'El estudio sobre el coronavirus de los murciélagos en China cumplió los requisitos de la subvención de los NIH, según EcoHealth'.

Unas horas antes, el Journal había publicado un editorial en el que exigía que Daszak fuera citado a declarar sobre las afirmaciones de que ayudó a crear el Sars-CoV-2. El editorial consiste en gran parte en una reafirmación de las afirmaciones publicadas a principios de esta semana en el Post, que también pedía que se citara a Daszak.

Pero el editorial del Journal fue único al señalar un hecho clave que ninguno de los otros medios de comunicación que promueven el bulo han admitido: que la teoría de la 'filtración del laboratorio' ha sido impulsada por la 'derecha populista', es decir, el movimiento fascista en torno a Donald Trump. El editorial del Journal se quejaba de que 'hasta ahora los demócratas no parecen interesados' en la teoría de la 'filtración de laboratorio', 'quizás porque la derecha populista ha hecho de esto una causa'.

Durante casi dos años, Steve Bannon y sus co-conspiradores Raheem Kassam y Jason Miller, han promovido el libelo de que el Sars-CoV-2 es un virus creado por el hombre en el WIV. De hecho, la demanda central de los defensores del engaño de la filtración del laboratorio —que Daszak testifique bajo juramento ante el— se originó con el podcast fascista de Bannon.

En su podcast War Room: Pandemic, Bannon se refiere regularmente al movimiento detrás de Donald Trump, del que Bannon se considera el líder ideológico, como la 'derecha populista'.

El periódico de extrema derecha National Pulse saludó el editorial del Post, escribiendo:

Los llamamientos siguen a meses de informes de National Pulse destacando los amplios conflictos de intereses de Daszak con la WIV y el Partido Comunista Chino, que deberían haberle excluido de servir en organismos como el equipo de investigación de orígenes COVID-19 de la Organización Mundial de la Salud. The National Pulse, que pidió que Daszak testificara ante el Congreso hace seis meses, también ha revelado los estrechos vínculos entre Daszak y el director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, Fauci.

Estas fuerzas fascistas se han visto reforzadas por la campaña mediática calumniosa contra Daszak. Hay que desenmascarar sus mentiras y oponerse a ellas. Como escribió el World Socialist Web Site el miércoles por la noche

El World Socialist Web Site hace un llamamiento a todos los trabajadores, estudiantes y profesionales para que se opongan a los esfuerzos de los medios de comunicación estadounidenses por convertir a los científicos en chivos expiatorios y promover la xenofobia antichina. La culpa no es de los científicos que trataron de advertir al público, sino de los gobiernos que voluntariamente ignoraron la ciencia para llevar a cabo una política de infección y muerte masiva.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 28 de octubre de 2021)