Una empresa minera sueca informó a principios de mes de que había descubierto un gran yacimiento de minerales de tierras raras en el extremo norte del país.

Las tierras raras son una serie de 17 minerales que suelen encontrarse juntos y que se utilizan en la mayoría de aparatos electrónicos de alta tecnología, sistemas militares y baterías. Aunque están ampliamente distribuidas por todo el mundo, son difíciles de encontrar en concentraciones suficientes para que su extracción resulte económica.

El yacimiento fue descubierto por Luossavaara-Kiirunavaara Aktiebolag (LKAB), una empresa minera estatal que explota dos grandes minas de hierro en el extremo norte del país, justo dentro del Círculo Polar Ártico. El hallazgo se produjo en la mina Kiruna de LKAB, situada a unos 130 kilómetros de la frontera finlandesa y a 300 kilómetros de la frontera rusa.

Como muchos minerales críticos, las tierras raras se encuentran en cantidades relativamente bajas, a menudo cerca o entremezcladas con otros metales más comunes, como el cobre o el hierro. En este caso, los minerales se encontraron entremezclados con fósforo en un yacimiento de apatita de óxido de hierro a pocos kilómetros de la mina de Kiruna.

El descubrimiento fue anunciado por la prensa europea y estadounidense como un importante acontecimiento geopolítico que arrebataría a China el control de la cadena de suministro de tierras raras.

Paddy Hirsch, de NPR, lo describió como 'una gran cosa para Occidente'. En los últimos 10 años hemos visto que Estados Unidos en particular ha estado muy, muy preocupado por el hecho de que China tenga un control tan férreo sobre la producción de tierras raras. ... Así que este hallazgo en Suecia es muy importante para Occidente y para las naciones occidentales y la OTAN...'.

Según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), alrededor del 60% de las tierras raras del mundo proceden de China. La inmensa mayoría, más de un tercio de la producción total mundial, procede de un único lugar, el yacimiento de Bayan Odo, en la región de Mongolia Interior, al norte de China.

Estados Unidos es el segundo productor mundial de tierras raras, con algo más del 10% de la oferta.

En el contexto mundial, los nuevos yacimientos suecos son menos impresionantes de lo que sugiere la fanfarria mediática. LKAB afirma haber encontrado aproximadamente un millón de toneladas de óxidos de tierras raras. Sin embargo, ya hay unos 120 millones de toneladas de reservas en todo el mundo. Cuarenta y cuatro de esas toneladas se encuentran en China, mientras que Vietnam, Brasil y Rusia ocupan el segundo lugar con unos 20 millones de toneladas cada uno.

Sin embargo, las estimaciones de reservas pueden ser engañosas. No sólo se trata de conjeturas sobre una compleja formación geológica enterrada bajo tierra, sino que tampoco tienen en cuenta la facilidad de producción de las reservas.

En una rueda de prensa para anunciar el hallazgo, Jan Mostrom, CEO de LKAB, explicó: 'En realidad no sabemos lo grande que es. No sabemos realmente cómo, de qué manera, podemos utilizar, desarrollar este proyecto. Pero lo que podemos decir hoy, con lo que sabemos hoy, es que es con diferencia el mayor yacimiento de ETR [Elementos de Tierras Raras] de Europa'.

Actualmente no hay minas a gran escala en la Unión Europea (UE), y sólo un procesador relativamente pequeño de tierras raras situado en Estonia. China, en cambio, controla casi el 90% del procesamiento de tierras raras a nivel mundial.

La principal importancia del hallazgo de LKAB es que puede crear la posibilidad de que la UE desarrolle, dentro de sus propias fronteras, una cadena de suministro de tierras raras. Esto podría tanto permitir a los fabricantes europeos desafiar a sus competidores mundiales en mercados en rápida expansión, como la producción de vehículos eléctricos, como permitir a las principales potencias imperialistas del continente suministrar armamento moderno a sus ejércitos sin depender de materiales suministrados por rivales potenciales.

Como el World Socialist Web Siteha explicado anteriormente, Rusia es también un importante poseedor de minerales de tierras raras y minerales críticos en general. Tanto el gobierno de Biden como el de Trump han lanzado importantes iniciativas multimillonarias para desarrollar estos recursos minerales críticos bajo el control de Estados Unidos y sus aliados.

Aunque las discrepancias geográficas en la producción y procesamiento de tierras raras son en parte el resultado de la geología, tienen más que ver con la globalización de la producción y la transformación de China en el taller de explotación del mundo.

El auge de China como centro neurálgico de la electrónica y la fabricación industrial ha hecho relativamente conveniente, desde el punto de vista de las empresas con movilidad mundial, ubicar allí el procesamiento de minerales. Tiene la mano de obra barata y la tierra. Las fábricas chinas también suelen ser el destino de estos minerales procesados.

Además, la extracción y el procesamiento de minerales de tierras raras y otros minerales críticos es un proceso tóxico que deja daños duraderos en el medio ambiente. Hasta hace poco, las grandes empresas internacionales se contentaban con dejar que este sucio proceso se realizara en otros lugares.

El desarrollo real de la mina sueca tardará entre 10 y 15 años antes de que pueda comenzar la producción.

LKAB ha anunciado sus planes de convertirse en un importante procesador, no sólo de tierras raras, sino de todo tipo de minerales críticos. Recientemente ha adquirido la empresa noruega REEtec, especializada en formas más ecológicas de procesar tierras raras.

Como dijo David Hognelid, director de estrategia de LKAB, al New York Times: 'Queremos tener toda la cadena de valor'. LKAB proyecta actualmente un parque industrial que desarrollará estas capacidades de procesamiento en el norte de Suecia.

La ubicación de importantes cantidades de tierras raras, petróleo y gas natural en la región ártica es una de las razones por las que el alto norte es cada vez más objeto de intensos conflictos entre las grandes potencias regionales. Ocho países, entre ellos Estados Unidos, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega, Rusia y Suecia, tienen reclamaciones territoriales en el Ártico, algunas de ellas impugnadas. A medida que se derrite el hielo marino, la posibilidad de asegurarse el control sobre estos recursos clave, así como las vías marítimas recién abiertas para las rutas comerciales, ha fomentado un aumento de la actividad militar en la región.

El descubrimiento de tierras raras de LKAB se produce en plena escalada de la guerra entre la OTAN y Rusia en Ucrania. La semana pasada, Estados Unidos anunció el envío de carros de combate M1 Abrams, considerados los más avanzados del mundo, a las tropas ucranianas.

El imperialismo estadounidense y sus aliados europeos están decididos a derrotar y dividir a Rusia para hacerse con el control de las enormes cantidades de recursos naturales que yacen bajo su masa continental. Entre ellos se encuentran las tierras raras y grandes cantidades de petróleo y gas natural.

En este sentido, Estados Unidos ve la guerra como un peldaño en un conflicto mucho más mortífero con China. Los estrategas de guerra estadounidenses están preparando y tramando activamente esta guerra, en gran medida a espaldas de la población. Asegurar el suministro de minerales críticos como las tierras raras se considera una forma esencial de preparación, dada su importancia estratégica y el dominio de China del mercado mundial.

(Publicado originalmente en inglés el 29 de enero de 2023)