English

Reuniones en Berlín y Londres Atraen a un Público Agradecido

Utilice esta versión para imprimir

Reuniones celebradas el 26 de septiembre en Berlín y el 27 del mismo en Londres conmemoraron el sexagésimo aniversario del asesinato de león Trotsky. David North, presidente de la junta editorial del World Socialist Web Site [ WSWS —Sitio de la Maya Socialista Mundial] y secretario general del Partido Socialista por la Igualdad de Los Estados Unidos, explicó el papel histórico del gran revolucionario marxista y oponente de Stalin. El Comité Internacional de la Cuarta Internacional y el WSWS patrocinaron las reuniones.

North enfatizó que no era posible comprender la trágica evolución del último siglo sin estudiar los escritos de León Trotsky. Dijo: “En los escritos de León Trotsky la historia misma parece que está tratando de mostrarnos y aclarar lo que quiere y hacia donde va.”.

A pesar de que muchos han tratado de amansar el contenido político de las ideas y críticas de Trotsky e interpretarlas de tal manera que justifiquen las condiciones prevalentes, no ha sido posible hacerlo; León Trotsky es único entre las grandes figuras marxistas. El mismo Marx fue reinterpretado por la Socialdemocracia alemana y transformado en partidario del reformismo. Durante el período de Glasnot, la mayoría de las personas que Stalin había declarado enemiga de la Unión Soviética fueron rehabilitados. Pero la historia nos deja saber que el régimen estalinista se desplomó sin nunca haber rehabilitado a Trotsky. No lo hizo porque los análisis y comentarios de él eran demasiado concretos. Trotsky era la encarnación de una perspectiva política—la revolución socialista internacional—a la que era, aún décadas después de su muerte, imposible de legitimar. De ser así se le habría de considerar como alternativa al régimen burocrático soviético y al rumbo que ésta emprendiera hacia la restauración capitalista.

Vladimir Volkov, quien dirige la junta editorial rusa del WSWS, habló en la reunión que se celebró en la Universidad de Humboldt, Berlín. Describió el coloso desplome económico y social que actualmente se desarrolla en el territorio que antes se conocía como la Unión Soviética. El Sr. Volkov planteó el problema: ¿Significa esto que la Revolución Rusa de 1917 no tuvo sentido, que desde el principio su destino fue fracasar?"

Contestó: “¡Absolutamente que no! Las perspectivas internacionales que formaban las bases de la revolución no tenían nada que ver con la política de independencia nacionalista que la Unión Soviética promulgó a mediados de los 1920. Además, la posibilidad de la degeneración de la revolución por el sendero nacionalista ya se había predicho mucho antes de que ésta se diera”.

Existían sólo dos posibilidades para integrar a la Unión Soviética en la economía mundial La primera—cuyo objetivo era crear una economía a nivel mundial que se basara en las necesidades humanas, es decir, la perspectiva socialista que Trotsky defendía—era la sistemática y paciente colaboración con los estados obreros establecidos en los países industrializados. La segunda era la destrucción de las relaciones de propiedad establecidas por la Revolución Rusa y la re introducción del capitalismo, lo cual inevitablemente se vincularía al establecimiento de dictaduras y de la explotación extrema. Al suprimir a Trotsky y a la Oposición Izquierdista, continuó Volkov, la facción de Stalin ya dirigía a la Unión Soviética hacia su fallecimiento eventual.

“¿Qué diferenciaba al socialismo de Trotsky de otros ‘socialismos' del Siglo XX? O para ponerlo más preciso: ¿qué diferenciaba al marxismo genuino, representado por Trotsky, de las numerosas tendencias reformistas, estalinistas y nacionalistas que por cierto tiempo se llamaban, o continuaron llamándose, ‘socialistas' o ‘comunistas'?” Esta fue la cuestión que planteó Peter Schwarz, secretario del Comité Internacional de la Cuarta Internacional durante su contribución a la reunión de Berlín. “Claro, es posible dar una larga y amplia respuesta a tan compleja pregunta, pero lo importante es lo siguiente: para Trotsky la realización de la perspectiva socialista—la revolución socialista y la construcción de la sociedad socialista—era inseparable del esfuerzo por elevar la cultura de las masas y despertar sus posibilidades creativas”. El socialismo de Trotsky se basaba en una amplia visión del progreso humano, continuó Schwarz.

Julie Highland, miembro de la junta editorial del WSWS, presidió sobre la reunión celebrada en la International Students House, ubicada en la zona central de Londres. Presentó un bosquejo biográfico de Trotsky y explicó que su mayor contribución al marxismo había sido la lucha que emprendió contra la burocracia estalinista, lo cual condujo a la formación de la Cuarta Internacional. “Se enfrentó a golpes morales, emocionales y físicos que parecían imposibles de aguantar” para lograr completar, como dijera James P. Cannon, ‘su testamento a la humanidad...tesoro literario...que ni polillas ni el óxido pueden corromper'”.

“El esfuerzo infatigable para explicar y clarificar los temas políticos y sociales del día era el arma de Trotsky contra la burocracia. Si los escritos de Trotsky pudieran reunirse, constituirían 150 tomos sobre casi todos los temas. Incluyen La revolución permanente, Historia de la Revolución Rusa (tres tomos), La escuela estalinista de la falsificación y Problemas de la Revolución China; numerosos artículos acerca del fascismo y la situación en Alemania, especialmente luego de llegar Hitler al poder; la biografía titulada, El joven Lenín; obras sobre cuestiones sociales y artísticas, tales como Problemas de la vida cotidiana, La mujer y la familia y Literatura y revolución y, por supuesto, su clásico análisis de la degeneración de la Unión Soviética, La revolución desfigurada”.

Hyland concluyó su presentación con que los conceptos que esta vasta obra literaria expresa le dan un significado contemporáneo a Trotsky que todavía retumba.

Chris Marsden, secretario nacional del Partido Socialista por la Igualdad de la Gran Bretaña, discursó acerca de la manera en que los conceptos políticos de Trotsky alientan a la World Socialist Web Site, cuya evolución “se vinculó a la creencia, basada en lo científico, en la continuación de la validez de la perspectiva marxista...[en] la comprensión que la lucha exitosa por el socialismo exige ante todo el renacimiento de la rica cultura socialista que se creó durante las décadas que precedieron a la Revolución Rusa de Octubre en 1917”.

Continuó Marsden: “Trotsky y la generación de revolucionarios de la cual él era su mayor representante comprendieron que la revolución, cuyas bases son objetivas, requería que la clase obrera interviniera conscientemente en el campo político. La clase obrera no puede ni derrocar el orden en existencia, ni formar un nuevo mundo, a menos que a una cantidad significante de trabajadores se le capacitara de marxistas y se le inspirara con la visión política socialista que [la clase obrera misma] claramente expresa”.

Chris Talbot, quien dirige la sección de la World Socialis Web Site consagrada a África, expresó que las condiciones actuales de África eran quizás la peor crítica del capitalismo moderno. Explicó que el ingreso total de 48 naciones africanas de la región al sur del Sahara hoy día aproximadamente equivale al de Bélgica, país pequeñísimo. En este enorme territorio, la proporción de seres que mueren de enfermedades contagiosas es actualmente mayor que a comienzos de siglo. Talbot expresó que no era posible comprender lo que ha sucedido en África sin estudiar la teoría de la Revolución Permanente de Trotsky.

“¿Cuál ha sido la experiencia de la clase obrera y del campesinado en África durante los cuarenta años de pan africanismo o de regímenes que inicialmente lo fomentaban? De trágica manera ha verificado esta experiencia el análisis de Trotsky, que hace hincapié al callejón sin salida del nacionalismo burgués en los países oprimidos por los poderes imperialistas. Aparte de depender, hasta cierto punto, de la burocracia estalinista en la Unión Soviética durante el período de la Guerra Fría—lo cual les brindó a los regímenes pan africanos un poco de espacio para maniobrar y hasta a veces hacer posible que se lograran medidas de bienestar social limitadas—ni uno solo de los dirigentes nacionalistas africanos pudo zafar la llave estranguladora del imperialismo occidental o resolver los problemas de la pobreza y el subdesarrollo. Durante los últimos 25 años, todos estos dirigentes y sus sucesores políticos han adoptado la economía del mercado capitalista. Han aceptado no sólo el dominio del Fondo Internacional Monetario y las corporaciones transnacionales, sino también la catástrofe social que actualmente sumerge al continente”.

Luego de las presentaciones en ambas reuniones, hubo una sesión consagrada a preguntas y respuestas que cubrió una gran variedad de temas. Se recaudó más de $1000 para desarrollar al World Socialist Web Site. También se vendió cientos de dólares de literatura.

La WSWS pronto publicará los discursos principales que se pronunciaron en ambas reuniones.