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¿Qué alternativas políticas existen para los millones de personas de este país y del mundo entero que desean ponerle fin a la guerra contra Irak y derrotar la política de Washington, la cual promueve el militarismo, la represión y la reacción social?

Estas es la cuestión esencial a la cual se enfrentan aquellos que van a manifestarse este fin de semana en contra de la Convención Republicana en la ciudad de Nueva York.

Decenas de millones en Estados Unidos y en todos los rincones del mundo se manifestaron en febrero del 2003 en contra de la guerra que Estados Unidos estaba por lanzar contra Irak. Cuando el gobierno de Bush comenzó la invasión apenas un mes después, mostró que la voluntad de los pueblos no le importaba para nada. Pero también ún se hizo aparente una perspectiva muy limitada: que manifestaciones mayores y mejor organizadas pueden influir el parecer de cualquier candidato de la clase empresarial que resulte elegido en noviembre.

La política que se basa en escoger entre "el mejor de dos males" y en el apoyo a John Kerry tampoco ofrece ningún adelanto a la lucha contra la guerra en Irak, contra las agresiones que atropellan los derechos democráticos y la desigualdad social que aumenta cada vez más.

Kerry se ha comprometido no sólo a continuar la ocupación de Irak sino a expandirla. Declaró a principios de mes que habría votado a favor de autorizar a Bush para lanzar esta guerra preventiva, aún sabiendo que las armas para la destrucción en masa no existían. Esto prueba que la conquista de Irak y su riqueza petrolífera fue consecuencia de una política que ambos partidos apoyan en nombre de la clase empresarial gobernante de Estados Unidos.

Aquellos, como Ralph Nader y los Verdes, que proclaman que su participación en las elecciones puede "empujar" a los Demócratas hacia la izquierda sólo siembran ilusiones que este partido del imperialismo estadounidense de alguna manera puede ser transformado en un instrumento de la paz y de la reforma social.

El Partido Socialista por la Igualdad [Socialist Equality Party] ha postulado a varios candidatos en las elecciones de noviembre para luchar por la ruptura con el sistema basado en dos partidos capitalistas y crear un nuevo movimiento socialista basado en las masas trabajadoras. Nuestra campaña presenta una verdadera alternativa socialista y democrática a los Demócratas y a los Republicanos, así como también un programa que se basa en la unificación del pueblo trabajador de Estados Unidos con la clase obrera de todo el mundo en la lucha común contra el capitalismo mundial.

Sólo nuestra campaña exige que se le ponga alto a la guerra contra Irak y que las tropas estadounidenses sean inmediatamente retiradas, sin ninguna condición, de ese país.

Nuestros candidatos a la presidencia y a la vicepresidencia son, respectivamente, Bill Van Auken y Jim Lawrence. Han sido colocados oficialmente en la papeleta de votos en los estados de New Jersey, Colorado, Iowa y Washington. Hemos presentado peticiones para aparecer oficialmente en la papeleta de votos del estado de Ohio, y actualmente nos encontramos en medio de una campaña en el estado de Minnesota para lograr el mismo objetivo.

También hemos logrado la participación oficial de Jerry White y Carl Cooley en los estados de Michigan y de Maine, respectivamente, como candidatos al Congreso de Estados Unidos. Tom Mackaman también se ha postulado oficialmente para diputado de la cámara legislativa del estado de Illinois.

El mensaje del Partido Socialista por la Igualdad es que la clase obrera tiene que prepararse para la lucha contra cualquier gobierno, Demócrata o Republicano, que tome las riendas del poder en enero. La ocupación de Irak ha de continuar y ya se preparan guerras futuras. En mayo pasado, los Demócratas se unieron a los Republicanos en la Cámara de Diputados del Congreso de Estados Unidos y por un voto de 376 a 3 adoptaron una resolución que le advierte a Irán que su programa de armas nucleares es inaceptable. El lenguaje de la resolución, adoptado por ambos partidos, es muy parecido al que autorizó la guerra no provocada contra Irak.

No importa quien gane las elecciones, éste se verá cara a cara con una crisis económica cuyo motor son los déficits fiscales y la deuda extranjera, ambos insostenibles, para no decir los precios y las tasas de interés que van aumentando día a día. Esta situación inevitablemente ha de resultar en un nuevo período de luchas explosivas por parte de la clase obrera de Estados Unidos.

El Partido Socialista por la Igualdad dirige su campaña precisamente a esta fuerza social cuyo poder es enorme. Insistimos en que la lucha contra la guerra y por la defensa de los derechos democráticos sólo puede avanzar si nos basamos en los amplios sectores de las masas trabajadoras, los estudiantes, la juventud y los profesionales para que luchen por la creación de un movimiento socialista de las de masas.

Las causas de la guerra, de la represión y de la disminución de los niveles de vida no se deben a las personalidades de este o aquel político capitalista, sino a la crisis del sistema basado en la propiedad y el control privado de la economía; sistema que subordina todas las necesidades humanas y sociales a las ganancias y a la acumulación de las fortunas de individuos.

Sólo un movimiento que lucha para liberar a las fuerzas productivas de las garras de la oligarquía empresarial que domina la economía y ponerlas bajo el control democrático de la clase obrera puede establecer una igualdad verdadera y ponerle fin de una vez por todas a los horrores de la guerra y de la pobreza.

Así la reorganización de la economía de Estados Unidos haría disponibles los recursos para poner en práctica estos programas, los cuales resultarían en una vasta mejoría de las condiciones de vida de la clase obrera.

El PSI aboga por:

* Un amplio programa de obras públicas para garantizar empleos a todos;

* Un salario anual garantizado por el gobierno federal

* La reducción de la semana laboral a 30 horas por semana con salario de 40 horas

* Inversiones públicas para asegurar que la educación escolar sea de buena calidad y que la educación universitaria sea gratis para todos

* El seguro médico gratis para todos

* Proscribir la destrucción de los sindicatos obreros y de la reducción de los salarios

* El desmantelamiento del Ministerio para la Seguridad Nacional y la abolición del Acta Patriota

El SEP participa en las elecciones del 2004 con un propósito: echar las bases políticas y programáticas para la creación de un partido socialista de masas de la clase obrera. El PSI le insta a usted que no sólo vote por nuestro partido, sino que lea nuestros análisis de la política que publicamos en el World Socialist Web Site y nos ayude a distribuir nuestro programa socialista tan ampliamente como sea posible.

Para comunicarse con la campaña del partido Socialista por la Igualdad, envíe su correo electrónico a sep2004@socialequality.com

Para mayor información y donar dinero a nuestra campaña por medio del internet, visite nuestra dirección: http://www.wsws.org/us2004/

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