A mediados de mayo, la lista de congresistas de la organización Socialistas Demócratas de América (DSA) votó unánimemente a favor de un proyecto de ley de 40.000 millones de dólares que respalda la guerra por poderes dirigida por Estados Unidos contra Rusia. Ningún miembro de la delegación de la DSA emitió una declaración pública explicando su voto, y ninguno ni siquiera tuiteó para defender sus acciones. Evidentemente, la DSA esperaba que nadie se diera cuenta: un artículo de la revista Jacobin, afiliada a la DSA, informaba de la aprobación del proyecto de ley, pero no mencionaba los votos emitidos por los propios miembros de la DSA.

El lunes, la revista Jacobin volvió a publicar un artículo de 1916 del socialista estadounidense Eugene Debs en el que se oponía a la Primera Guerra Mundial y atacaba a quienes intentan conciliar el 'socialismo' con el apoyo al imperialismo. En una introducción escrita, Jacobin se presenta como el heredero de la tradición socialista y antibélica de Debs: 'En este Día de la Memoria, deberíamos volver a dedicarnos a luchar contra los horrores de la guerra. Así que aquí tenemos un artículo de 1916 de Eugene Debs sobre por qué el internacionalismo está en el corazón de la política socialista'.

La DSA no está luchando contra los horrores de la guerra, los está financiando, y el artículo de Debs es una exposición devastadora del propio DSA.

Debs denuncia a los 'autodenominados socialistas que son nacionalistas en primer lugar y que ponen la 'patria' de sus amos por encima de toda la tierra y de todos los trabajadores del mundo'. Exclama a los partidos de la II Internacional por votar a favor de los créditos de guerra imperialistas. Tales partidos y políticos 'no son socialistas en absoluto' sino 'traidores a la causa'.

'Cuando sonó el tocsin', continúa Debs, 'la obligación internacional fue barrida, u olvidada, y en el frenesí despertado por los cacareos militares, miles de miembros de partidos socialistas se convirtieron en los más intensos nacionalistas y 'patriotas', negando por completo sus principios y obligaciones internacionales y convirtiéndose en traidores al movimiento'.

Debs, que sería encarcelado al año siguiente por oponerse a la entrada del imperialismo estadounidense en la Primera Guerra Mundial, escribe: 'Los verdaderos socialistas no pueden ser al mismo tiempo nacionalistas, militaristas y 'patriotas' capitalistas. O son una cosa o la otra; no pueden ser ambas'.

El voto de la DSA a favor del proyecto de ley de ayuda militar de 40.000 millones de dólares es un respaldo a la guerra imperialista dirigida por EEUU que ha llevado al mundo al borde de la catástrofe nuclear. La DSA actuó por unanimidad, con cada miembro de la DSA votando a favor del proyecto de ley, incluyendo a Alexandria Ocasio-Cortez, Jamaal Bowman, Cori Bush y Rashida Tlaib. Ilhan Omar y Bernie Sanders, apoyados por la DSA, también votaron 'sí'.

Ahora están surgiendo detalles del proyecto de ley que dejan claro que la DSA y su delegación en el Congreso han respaldado el rearme masivo de la maquinaria de guerra imperialista estadounidense y han firmado un cheque en blanco a los fabricantes de armas y al complejo militar-industrial. Los misiles, tanques, balas, proyectiles de artillería, drones y helicópteros de ataque con el sello 'Hecho por la DSA' se utilizarán no sólo en Ucrania, sino contra las víctimas de la guerra estadounidense en todo el mundo.

Los primeros contratos de armamento posibilitados por el proyecto de ley están saliendo ahora a la luz. El 27 de mayo, el Pentágono anunció que había adjudicado a Raytheon Technologies un contrato de $624 millones para reponer el stock de misiles Stinger del ejército estadounidense, 1.400 de los cuales ya ha enviado a las fuerzas proxy de extrema derecha en Ucrania. Citando un comunicado de prensa de Raytheon en el que se anuncia el acuerdo, Axios escribió que 'el contrato se financia a través del paquete de ayuda militar y humanitaria de $40 mil millones que el Congreso aprobó para Ucrania este mes', y que permitirá a Raytheon construir 1.300 misiles Stinger. Cada misil cuesta $450.000, suficiente para pagar el salario anual de diez profesores.

La DSA también ha votado para financiar la producción de misiles Javelin, que se producen a través de una empresa conjunta de Raytheon y Lockheed Martin. Lockheed Martin describe el Javelin como 'el principal sistema antiblindaje del mundo disparado desde el hombro', que 'lleva la lucha al enemigo'. Se calcula que cada misil cuesta $250.000, suficiente para alimentar a 6.250 niños desnutridos durante un año.

En las próximas semanas se anunciarán nuevos contratos para la producción de municiones avanzadas, como armas guiadas por láser y por satélite. Un portavoz del ejército dijo a Defense News la semana pasada: 'El ejército está trabajando en una propuesta para utilizar los dólares de adquisiciones avanzadas para comprar piezas y materiales de larga duración para municiones avanzadas'.

Según un análisis del think-tank CSIS, el proyecto de ley también prevé $6 mil millones en una cuenta de transferencia especial para proporcionar 'entrenamiento, equipo, armas, apoyo logístico, suministros y servicios, salarios y estipendios, sostenimiento y apoyo de inteligencia a las fuerzas militares y de seguridad nacional de Ucrania, es decir, casi cualquier cosa que Ucrania pueda necesitar'. El CSIS señala que 'al Congreso no le suelen gustar las cuentas de transferencias porque parecen 'fondos para sobornos''. En este caso, la DSA está votando para armar a organizaciones fascistas como el Batallón Azov, que proviene de los colaboradores ucranianos con el Holocausto nazi.

Además, el proyecto de ley envía $4 mil millones para armar a las 10.500 tropas estadounidenses en Europa del Este, incluso mediante la adquisición de una batería adicional de misiles tierra-aire Patriot, un elemento del proyecto de ley que el CSIS señaló como una 'sorpresa'. Cada sistema Patriot cuesta aproximadamente $1.000 millones, suficiente para albergar a 30.000 personas sin hogar durante un año. Las baterías Patriot también son producidas por Raytheon y Lockheed Martin.

El proyecto de ley también incluye $364 millones en gastos de investigación y desarrollo, para que los militares y los fabricantes de armas puedan desarrollar formas aún más eficaces de matar y destruir.

Los fabricantes de armas están celebrando la votación. Un titular de Los Angeles Times del 27 de mayo dice: 'Animados por la guerra de Ucrania, los valores de defensa escapan a lo peor de la caída del mercado'.

El artículo comienza así: 'Lockheed Martin Corp., Northrop Grumman Corp. y otros fabricantes de material militar han evitado lo peor de la reciente caída del mercado bursátil en general, que ha durado siete semanas, superando al S&P 500 en medio de un retroceso del gasto de los consumidores, el endurecimiento de la política monetaria y la preocupación por una posible recesión'.

En una conferencia en el Bank of America, poco después de la aprobación del proyecto de ley en la Cámara de Representantes, el director financiero de Lockheed Martin, Jay Malave, dijo que estaba 'satisfecho' con el proyecto de ley y que esperaba que el Congreso aumentara el gasto militar en un futuro próximo. Desde que el proyecto de ley fue firmado por Biden el 21 de mayo, las acciones de Lockheed Martin han aumentado un cuatro por ciento y las de Raytheon y General Dynamics han subido un seis por ciento, generando millones de dólares para los ricos accionistas que tienen que agradecer a la DSA, Ocasio-Cortez y Sanders.

Cada dólar que el DSA ha votado para dar a estos Mercaderes de la Muerte es un dólar que ha quitado de las manos de los trabajadores estadounidenses que luchan para enfrentar la inflación, la pobreza y el creciente costo de la vida. El voto prolongará drásticamente la guerra y hará que los precios suban aún más en los distritos de la clase trabajadora que los congresistas del DSA representan.

La renta media per cápita en el distrito congresual de Alexandria Ocasio-Cortez en Nueva York es de $29.356, y el 20 por ciento de los niños del distrito viven por debajo del umbral oficial de pobreza. La renta media en el distrito del Congreso de Nueva York de Jamaal Bowman es de $46.866 y una sexta parte de los niños viven por debajo del umbral de la pobreza. En el distrito de Missouri de Cori Bush, la renta per cápita es de $31.086 y el 26% de los niños viven por debajo del nivel de pobreza. Los residentes del distrito de Rashida Tlaib en Michigan ganan una media de $21.642 mientras que un asombroso 41 por ciento de los niños del distrito viven por debajo del umbral de la pobreza. El voto de cada político a favor de la guerra es un voto para privar a cientos de miles de trabajadores de sus propios distritos de las necesidades sociales básicas.

La subordinación de la DSA de los intereses de los trabajadores al Pentágono y a los fabricantes de armas no es un error, es una expresión de su carácter proimperialista y capitalista. Este es el papel que ha desempeñado el DSA durante 40 años. Como escribió Debs, 'Los verdaderos socialistas no pueden ser al mismo tiempo nacionalistas, militaristas y 'patriotas' capitalistas. O son una cosa o la otra; no pueden ser ambas'.

(Publicado originalmente en inglés el 30 de mayo de 2022)